La función de Javier Colina en el Principal arranca la nueva edición
Las entradas vendidas para una nueva edición que mantiene su calidad
El Jazz Vitoria 2013 ha comenzado, en el Teatro Principal con la actuación del contrabajista navarro Javier Colina y el pianista norteamericano Kirk Lightsey. Se trata de una magnífica ocasión de presenciar un concierto de uno de los nuestros compartiendo escenario con un pianista que ha tocado con grandísimos artistas del jazz como Paul Chambers, Chet Baker o Dexter Gordon. Por la noche, en Mendizorrotza, y para acabar el día , vendrá el espíritu repleto de energía Los Ángeles Crenshaw Gospel Choir que ofrecerá un concierto de góspel más que recomendable.Para muchos aficionados al jazz, este pamplonés es tal vez el mejor contrabajista que hay en España.
Colina comenzó a destacar en los 90, interviniendo en la película “Calle 54” de Fernando Trueba y acompaña en conciertos y grabaciones a músicos de una gran experiencia como Hank Jones, Barry Harris, y especialmente a Tete Montoliu. También ha colaborado con Bebo y Chucho Valdés y el Cigala. El intérprete navarro forma parte de la Konexioa de este año y ha elegido al gran pianista norteamericano Kirk Lightsey.
Comienza su carrera con músicos como Paul Chambers, Barry Harris y Charles McPherson. A principios de los setenta se trasladó aLos Angeles donde trabajó con Bobby Hutcherson, Pharoah Sanders, Harold Land y Esther Philips. En el año 1965 grabó con Sonny Sitt, y realizó cinco álbumes con Chet Baker. Desde 1979 a 1983 formó parte del cuarteto de Dexter Gordon lo que contribuyó a consolidar su nombre como un pianista de élite.
El Festival de Jazz de Vitoria va haciéndose mayor a base de buenos conciertos, una ciudad que lo arropa, un público fiel y unos artistas que bendicen el evento con su presencia año tras año. Este mes de julio el certamen cumple 37 temporadas y para celebrarlo se ha permitido el lujo de presentar en el mismo escenario al guitarrista local Paco de Lucía y al gran pianista de jazz Chick Corea. Melody Gardot, Branford Marsalis, Bill Frisell o Antonio Sánchez son algunos de los artistas que completan el potente programa.
El miércoles actuará el joven trompetista Ibrahim Maalouf en Mendizorrotza. El año pasado lo hizo de manera sobresaliente en la sección Jazz del Siglo XXI y este año hay mucha expectación por comprobar su progresión. Bill Frisell cerrará la noche con su guitarra en lo que será un concierto de cuerda y bombo en toda regla: violines, viola, chelo, guitarra y batería. Esta inusual composición podría suponer una alternativa interesante al resto de actuaciones en Mendizorrotza.
El jueves cabe destacarse a la cantante estadounidense Melody Gardot. Una historia de superación, accidentada, difícil pero de feliz final. Melody es de una ternura y seducción musical sin límites. Líder de su banda, de su público y de todo aquel que tiene el placer de escucharla. Que suba al escenario ayudada de un bastón (llevado con mucha elegancia, por cierto) no significa ni debilidad, ni impotencia ni ningún otro tipo de carencia: es toda una demostración de control y calidad. Un must en este Jazz Vitoria.
El viernes, los protagonistas principales del Vitoria Jazz serán el trompetista Tom Harrell y el otro local Bradford Marsalis. Los organizadores del festival denominan esta jornada como la más jazzística por excelencia.
Las calles de la ciudad empiezan a compartir la sensación del festival
Otra de las grandes sugerencias que no puedo dejar de lado es la del fenomenal baterista Antonio Sánchez. Desde que ya actuó con Pat Metheny hace unos cinco años y no ha dejado de sorprender con su calidad, su vigorosidad a las baquetas, su velocidad, su capacidad de improvisación y demás cualidades a la batería. El sábado a las 18:00 horas actuará en el Teatro Principal con Dave Binney (saxo), John Screet (piano) y Matt Brewer (bajo).
Como final perfecto a un festival que ha mantenido el nivel desde el primer día sitio para hablar del grandísimo guitarrista Paco de Lucía y el piansta norteamericano Chick Corea. Ambos compartirán escenario en Mendizorrotza para dejar en la historia de este festival otra nota inolvidable. Es habitual que Paco de Lucía colabore con diferentes artistas de jazz en experimentos que casi siempre suenan a la perfección. En esta ocasión se juntan dos grandes y es de esperar que su combinación sea apoteósica.
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