El ridículo del récord de la tortilla
La oposición pide explicaciones al alcalde de Vitoria y el gobierno municipal traslada el análisis de los motivos del fracaso a los servicios jurídicos
El supuesto récord Guinness de la tortilla de patata se ha convertido en una pesadilla para el Ayuntamiento de Vitoria, y en especial de su equipo de gobierno. A la espera de que se confirme de manera oficial, toma cuerpo la fundada sensación de que no hay tal hazaña. Los grupos de oposición exigen ya responsabilidades. El PP, por su parte, reconoce la trascendencia que tuvo el acontecimiento y dispone a los servicios jurídicos para que lo estudien.
De momento, la oposición entiende que Vitoria ha hecho el "ridículo" al haber fracasado en su intento de entrar en el Libro Guinness de los Récords con una tortilla de patata gigante. Los grupos municipales de PNV, EH Bildu y PSE-EE se han hecho eco de una noticia difundida por la publicación digital "Norte Exprés", en la que se afirma que el Libro Guinness de los Récords ha rechazado la solicitud de Vitoria de obtener el título de la tortilla de patata más grande del mundo porque no acepta la forma en la que se cocinó, "en porciones precocinadas tipo puzzle".
El tema ha condicionado la semanal comparecencia de los lunes del alcalde de Vitoria, Javier Maroto (PP), que ha reconocido no tener la notificación oficial del rechazo de la solicitud pero ha opinado que intentar batir el récord fue en sí mismo un hecho "positivo" y que "mereció la pena".
Fuentes municipales han explicado a Efe que la organización del evento correspondió a la Capital Española de la Gastronomía, en el marco del título que este año disfruta Vitoria, y han asegurado que esta asociación ya conocía cómo se iba a hacer la tortilla y decía que era "posible" conseguirlo.
No obstante, han pedido rigurosidad en torno a este tema y han dicho que el Ayuntamiento pedirá explicaciones sobre lo ocurrido a la Capital Española de la Gastronomía. Asimismo, han recordado que fue un acto de difusión muy importante para Vitoria. Incluso la película Rey Gitano, de Juanma Bajo Ulloa, rodó varias secuencias con los protagonistas de su nuevo filme en pleno intento de récord de la capital alavesa.
En declaraciones a Efe, la edil nacionalista Nerea Melgosa ha denunciado la "tomadura de pelo" que supuso este evento y ha opinado que, visto el desenlace, ha ido "en contra del prestigio" de Vitoria.
Ha considerado que el intento, que se celebró el pasado 2 de agosto en la Plaza de la Virgen Blanca, sólo ha servido para hacer "boato" en favor del alcalde. En este sentido, ha denunciado que el gobierno del PP de Vitoria es el ejecutivo municipal "del timo" y ha opinado que ha sido "una tomadura de pelo" porque se han gastado dinero público "en fomentar la imagen del alcalde".
Antxon Belakortu (EH Bildu) ha denunciado la "gran mentira" que ha supuesto el intento de entrar en el récord Guinness con una tortilla de patata gigante y ha opinado que "si lo que quería el PP es que viniera Tele 5 para salir en la tele, no hacía falta haber hecho este circo ni haber dado 45.000 euros a un cocinero en concreto", Senén González, que fue quien dirigió la elaboración.
Belakortu ha advertido de que "esta gran mentira no puede quedar así" y Patxi Lazcoz (PSE) ha pedido la comparecencia urgente del alcalde. Lazcoz ha calificado de "tocomocho" lo ocurrido con la tortilla de patata gigante y ha lamentado que Vitoria sea ahora "la capital del ridículo" ante la prensa nacional e internacional.
La difusión del evento llegó "a 73 medios escritos, 311 digitales, a las principales cadenas de televisión regionales y nacionales, y hasta a una televisión de Kuwait, y ahora ¿qué les vamos a contar?", se ha preguntado.
UPyD, que no tiene representación en el Ayuntamiento, ha exigido a Maroto que recupere de manera "inmediata" los 45.000 euros que costó la tortilla de patata.
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