La última temporada de ‘Merlí’ será la “más cañera”

Primero de bachillerato, primer semestre de segundo de bachillerato y el semestre final antes de la selectividad. El recorrido que ha hecho la serie Merlí llega a su punto final siguiendo el natural devenir de esa etapa de la educación y los peripatéticos y su peculiar profesor de filosofía dicen adiós en la próxima temporada, de 14 capítulos, que se emitirá el próximo otoño. “Han sido cinco intensos años, entre la preparación del guion y los rodajes. Todo tiene su principio y su fin y Merlí ha llegado al suyo” explica Héctor Lozano, guionista de la serie de TV3 producida por Veranda TV y dirigida por Eduard Cortés. El propio Francesc Orella, Merlí, lo subrayaba: “Sabe mal poner fin a algo que ha funcionado muy bien pero tres temporadas ya está bien y hay que pasar a otras cosas”.

Los protagonistas también están de acuerdo en que había llegado la hora de finiquitar un proyecto que ha sabido conectar con un público muy heterogéneo. “El espectador se ha sentido identificado porque lo que se cuenta son tramas sencillas al poner en relación el mundo de los alumnos, el de los profesores y las familias. Quien más quien menos ha vivido algo parecido”, añade Lozano que asegura que el broche final será “más intenso”.

El equipo está rodando estos días los nuevos capítulos en el instituto Guimerá de la ficción que es la escuela Vitae, en el barrio del Vall d’Hrebron de Barcelona. Es la hora del descanso de la mañana y técnicos y actores toman unos bocadillos con los minutos contados porque el rodaje apremia.

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¿Qué cosas nuevas traerá la última temporada? De entrada, la incorporación de dos nuevos profesores: Gabi, de literatura que encarna Pau Vinayls, y Silvana, de historia con la actriz Carlota Olcina que, en algún sentido, echará un pulso a Francesc Orella, el indomable Merlí: “Yo, como él, también me gano a los alumnos pero soy un poco su antagonista y le desestabilizo”, apunta la actriz. Merlí seguirá impartiendo sus peculiares clases de filosofía que en esta ocasión girarán en torno a algunos nombres relevantes que todavía no habían salido en las anteriores entregas, como Albert Camus, Sören Kierkegaard, Hannah Arendt y Karl Max, entre otros. Y, por supuesto, seguirá siendo un profesor seductor y con métodos poco ortodoxos que en esta temporada se queda un poco solo porque su hijo, Bruno, (el actor David Solans) no regresa de Roma —donde en la anterior temporada se estableció— y su madre, Carmina (la actriz Anna Maria Barbany) se va de gira de teatro.

Las familias de los jóvenes estudiantes vuelven a ser coprotagonistas de la serie con la aparición de nuevos personajes. Todo ello en lo que figura que es el último año de bachillerato con la selectividad a la vuelta de la esquina. Tiempos convulsos. “Se podría decir que es bastante más explosiva”, afirma Gerard (Marcos Franz). Será más “cañera”, coinciden varios de los protagonistas, porque pasan “cosas fuertes” que tienen su efecto. Sin querer entrar en muchos detalles — por los temidos spoilers— la irrupción de las drogas tiene algo que ver en esos cambios. “Está claro que hemos madurado y nuestra personalidad ha cambiado. Eso se nota en la nueva temporada pero sin perder nada de la alegría y del buen rollo que tenemos”, aclara Tania (Elisabet Casanovas).

Una maduración que han experimentado ellos mismos como actores ya que Merlí ha sido el punto de inicio de su carrera artística para bastantes. La mayoría empezaron con edades muy cercanas a las de los papeles que encarnaban y la experiencia de trabajar juntos ha trabado fuertes lazos de amistad que están teniendo continuidad en proyectos profesionales conjuntos futuros.