El examen de las oposiciones de RTVE que se repiten este sábado ya está impreso, aunque se iba a acortar el plazo para evitar filtraciones

El ‘plan anti-filtración’ de RTVE para las oposiciones al puesto de informador que tendrán que repetirse este sábado por la difusión del examen en la anterior convocatoria no se cumplirá en su aspecto temporal. Las medidas que se adoptaron en el manual de los comités de valoración tras la suspensión de la prueba el pasado 29 de septiembre incluían una reducción del plazo entre la composición final del cuestionario y su impresión, prevista en principio para “el mismo día de la prueba”. EL PAÍS ha podido saber que el cuestionario ya se ha impreso este jueves. La corporación argumenta al respecto que han intentado acortar los tiempos, pero la imprenta no contaba con personal suficiente al ser festivo este viernes.

En paralelo, la empresa ha publicado este jueves un comunicado según el cual, “ante las graves consecuencias de la dana que han afectado a nuestro país, RTVE recuerda a todas las personas candidatas que existe un protocolo de actuación, para posponer/repetir las pruebas de los procesos selectivos convocados”. Y llama a los candidatos afectados por esta tragedia a presentar un escrito a la comisión de empleo (comisionempleo.protocolo.2llamamiento@rtve.es) “solicitando expresamente la realización de la prueba en una nueva fecha, detallando y acreditando la causa que impida su realización en el día señalado”. Además de más de 150 muertes, las inundaciones y desprendimientos provocados por la gota fría han causado más de 90 cortes de carretera en la Comunidad Valenciana y en Castilla-La Mancha, según los datos de la Dirección General de Tráfico. Permanece cortada, además, la conexión ferroviaria de alta velocidad entre Valencia y Madrid.

Las modificaciones del plan anti-filtración añadían una aclaración, en caso de no poder realizarse el mismo día de la prueba, sobre el momento de ejecutar las impresiones: “Si el volumen de personas candidatas es muy elevado, etc…, con la antelación estrictamente necesaria para que estén disponibles el día de la ejecución de la prueba”. La “antelación” con la que al final se contará es de dos días, la misma con la que se llevaron a cabo las impresiones en el anterior examen cuyas preguntas y respuestas se filtraron provocando su cancelación. RTVE asegura que hay un sistema de seguridad para la custodia de los cuestionarios impresos, sin aclarar dónde van a permanecer hasta el sábado. Y que, como indicaban las nuevas medidas del manual, se han creado dos exámenes, uno principal y otro como precaución ante posibles filtraciones (no previsto en la anterior convocatoria), con 100 preguntas y 20 de reserva cada uno. Además de la composición de los dos exámenes, el tribunal de las oposiciones ha insistido a la empresa que ambos cuestionarios estén también impresos por si hay que usar uno u otro como medida de seguridad. Y así ha sucedido.

En un comunicado de RTVE sobre las modificaciones para la nueva realización de la prueba se anunció el pasado 3 de octubre, días después de la cancelación del examen: “En concreto, se crea la figura de la Presidencia que, junto con la Secretaría de dicho Comité, serán los únicos conocedores del contenido íntegro de la prueba. Además, se elaborarán 2 exámenes, uno de ellos de reserva. También se reducirán los tiempos respecto a la elaboración e impresión de pruebas”. La reunión para la puesta en común de las preguntas y respuestas por parte de los diez vocales del tribunal de oposiciones ha tenido lugar durante la mañana de este jueves, con un día festivo de por medio y dos jornadas antes de la convocatoria prevista para el próximo sábado, 2 de noviembre, a las 17 horas, en el campus de la Universidad Complutense en Somosaguas (Madrid).

Según fuentes conocedoras del proceso, cada vocal ha aportado sus preguntas en un pendrive, para la puesta en común en un ordenador cuya selección final de cada cuestionario solo ha conocido el presidente del tribunal. Posteriormente, el pendrive de cada vocal ha sido puesto a disposición de la secretaria del tribunal, que ha procedido a guardarlos en sobres custodiados en la caja fuerte de un despacho de la dirección de recursos humanos de la empresa. Allí permanecerán los archivos generados hasta después de la celebración del examen.

Diversos sucesos han jalonado el proceloso devenir de las oposiciones al puesto de informador de RTVE desde su cancelación el pasado 29 de septiembre. Los 5.000 aspirantes recibieron aquel domingo un mensaje a través de la plataforma interna anunciando su cancelación por “causas de fuerza mayor” tres minutos antes de la celebración del examen a las 11 horas. El tribunal de oposiciones había debatido durante las cuatro horas y media anteriores si cancelar la prueba sabiendo que se había producido una filtración de la mayoría de las preguntas y respuestas.

Aquel día, RTVE interpuso una denuncia ante la Policía y todos los vocales de aquel tribunal dimitieron al día siguiente. La corporación puso en marcha una investigación interna, y poco después promovió el plan anti-filtración que no se va a cumplir en su aspecto temporal. La investigación policial, a la que añadió otra denuncia el sindicato Comisiones Obreras, acabó derivada a la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF). El pasado 17 de octubre, EL PAÍS publicó que el nombre de un representante designado por UGT en el anterior tribunal de oposiciones aparecía en los metadatos del documento de la filtración y dicho vocal negaba ser el autor del archivo. Durante la noche de aquel día, RTVE abrió un expediente disciplinario a uno de sus trabajadores como “resultado del avance de las investigaciones derivadas de la filtración”. Y al día siguiente tuvo lugar una detención relacionada con los hechos. El arrestado, que no formó parte del tribunal de las oposiciones y estaba vinculado a UGT, se negó a declarar y fue puesto en libertad. La corporación ya había hecho públicas para entonces las preguntas y respuestas del anterior examen. Y ahora quedan dos días para que se repita la prueba con un nuevo cuestionario y otro de reserva.