‘Hermano mayor’ vuelve

Después de las idas y venidas y problemas contractuales, Pedro García Aguado (Madrid, 1968) estrena hoy la quinta temporada de Hermano mayor, tras el éxito cosechado el curso pasado con una media de casi 2.200.000 espectadores, según la cadena. El programa, que emitirá esta noche una doble sesión en Cuatro (21.45), cuenta con varias novedades en un año especialmente marcado por la situación económica de muchas familias. Así, este año, García Aguado y su equipo colaboran con los amigos de los jóvenes, de quienes podremos ver también imágenes grabadas por ellos mismos, y aparecerán de forma puntual famosos como el humorista Goyo Jiménez, el rapero El Langui o el piloto de motos Toni Elías.

Los dos primeros casos, de los más de 10 preparados a lo largo de más de seis meses de grabación, comienzan con Jenny, una joven de 18 años en libertad vigilada por robo, y Juan Carlos, un chico de 20 años experto en atemorizar a sus padres. “Los chavales no son malos, se comportan mal. La clave de nuestro trabajo es la empatía, que vean cómo se sienten sus padres”, argumenta el exwaterpolista, “nadie quiere vivir de esa manera”.

En esta quinta temporada, Hermano mayor se encuentra el reto de hacer frente a unos padres desbordados que acostumbraban “a regalar de todo a sus hijos para que así les quisiesen. Como ahora no puedo, los hijos no lo entienden y hemos llegado a ver cómo uno le echaba en cara a su padre que no fuese a trabajar”, espeta García Aguado. Ante un escenario de recursos limitados, el principio del cambio comienza por transformar “la manera de ver y entender el mundo, dejar de ir de víctima, de justificarse y empatizar. Hay que eliminar la sensación de inutilidad que les bloquea”, comenta el coach.

Las escenas impactantes del vídeo promocional adelantan casos duros pero muy reales, recuerdan desde la cadena. “¿Estás a gusto con lo que consigues? ¿Me dejas que te enseñe otros caminos?”, pregunta García Aguado, justo antes de un final emotivo con un abrazo de Jenny y un silencio incómodo entre los presentes. Pero los episodios más complicados, confiesa el exdeportista, han sido aquellos en los que el origen del problema es incierto. “Antes solía ser por droga, pero ahora algunos son difíciles de saber. Además, los chavales son expertos en justificarse”.

García Aguado, con una sonrisa al ser comparado con el adiestrador de perros César Millán, asegura estar contento con su vuelta a Cuatro tras un breve flirteo con laSexta. “Estaba físicamente cansado y me asesoraron mal cuando fiché por ellos. Ahora el tema está en manos de los abogados... Sí, estoy un poco denunciado por asuntos de contratos”, explica entre la carcajada de la sala que estará atado de nuevo por dos años.