Tadeo Jones 2: aventura en casa
El personaje viaja a Granada en la secuela de la película de animación más taquillera de España
Para un aventurero, pasarse años encerrado debe de ser un auténtico drama. Más aún, si el espacio es extremadamente angosto. Nada de tumbas ocultas o antiguas ciudades perdidas. Tadeo Jones veía desfilar los días desde las cuatro paredes de un cajón. El de los proyectos apartados de Enrique Gato. El creador, que trabajaba como animador de videojuegos, dibujó en 2001 a un obrero de la construcción vallisoletano que residiera en Chicago y soñara con ser un arqueólogo a lo Indiana Jones. Ahí estaba su nuevo explorador. Y, sin embargo, no sabía qué explorar: Gato tenía a Tadeo, pero ninguna historia para él. De ahí que le condenara a colgar el sombrero incluso antes de calzárselo. Tres años hubo de aguantar el personaje hasta salir al fin a la aventura: en un corto de 2004, se adentraba en una pirámide. Desde entonces, Tadeo nunca ha vuelto al cajón: más bien, ha recorrido el mundo, desvelado misterios y enamorado a millones de espectadores.
Porque, tras un segundo corto, con Goya incluido, Enrique Gato y Tadeo Jones se lanzaron de la mano a la epopeya de su primer largometraje. Ambos hallaron un tesoro inesperado: el cineasta se llevó en 2012 el Goya al mejor director novel (junto con otros dos cabezones). Y el personaje conquistó el corazón del público: Las aventuras de Tadeo Jones es la película de animación más vista y taquillera de la historia de España, con 18,2 millones recaudados —45 en todo el mundo, ya que se vio en más de 50 países—. “Aunque lo más grande es que se convirtió casi en un icono cultural”, asegura Gato. De ahí que fuera inevitable su regreso. Tras cinco años, Tadeo Jones 2. El secreto del Rey Midas está lista. Y llega este viernes 25 a las salas españolas.
El coloso de la promoción
Tadeo Jones 2 vuelve a contar con un aliado fundamental: Telecinco Cinema, que produce y promocionará el filme. "A nivel comercial es una barbaridad, supone la mayor herramienta de marketing de España", explica el cineasta Enrique Gato. Es decir, que va a costar no enterarse del regreso de Tadeo Jones a las salas. "En el gimnasio, el otro día, un chico me dijo: 'Me acuerdo todo el rato de ti. ¡Es que no dejo de ver al maldito Tadeo en la tele!", agrega el otro director, David Alonso.
Para poner a correr su maquinaria, eso sí, los directivos de Telecinco Cinema piden garantías. "Crear estas películas es una labor de conjunto de muchísima gente. Ellos buscan un cierto tipo de producto, dan muchas pautas de qué quieren y cómo lo quieren. Eso no implica que tú como director no puedas establecer tu visión, aunque quizás no lo hagas al 100% como en otros casos", relata Gato.
“Queríamos mejorar la primera película, llevarla mucho más allá en todo: en el lado técnico, creativo, en los personajes, la puesta en escena”, relata David Alonso, artista de layout (el encargado de plantear dónde se coloca la cámara virtual) en el filme original y ahora codirector junto con Gato. Con cerca de nueve millones de presupuesto, y una fecha de entrega que sonaba a otra aventura —“la producción ha durado unos 22 meses, normalmente se tarda tres o cuatro años”, explica Gato—, ambos cineastas se han esmerado para resolver otro misterio: la fórmula áurea para una secuela.
“Lo esencial es mantener a los personajes, pero exprimirlos. Es un poco lo que ocurre en las series televisivas: en las primeras temporadas, los protagonistas están a medio hacer, y hay que empujarlos”, afirma Gato. Así que ahí están todas las caras conocidas para el público de la aventura original: Tadeo, su perro Jeff, la arqueóloga Sara Lavrof o el loro Belzoni. Tanto cariño les tienen a sus criaturas que esta vez los cineastas han decidido llevárselas directamente a casa. En la primera entrega, Tadeo y compañía visitaban Perú. Ahora, en cambio, viajan a España. En concreto, a Granada. “Uno de los productores nos sugirió que sería un escenario espectacular”, cuenta Alonso. Además, la civilización frigia —la del Rey Midas— habitó el sur de España de ahí que la ciudad nazarí también sirviera a la trama. Y, luego, claro, estaba la posibilidad de recrear el patio de los Leones de la Alhambra o una enloquecida persecución por las calles del Albaicín. Como en los filmes de Hollywood, pero a la española. Marca de la casa, en el fondo: el propio Tadeo es un Indiana Jones pasado por el filtro de Superlópez y Mortadelo y Filemón.
Con esta receta, el filme se va a estrenar en al menos 40 países. Y aspira a igualar o superar incluso los récords de su antecesor. Para ello, necesita seducir masivamente al público familiar e infantil al que parece claramente dirigirse. Humor, gags, aventuras y paisajes asombrosos, en un viaje hasta la Capadocia turca. Es decir, séptimo arte para todos. “Si dijéramos que es cine de autor habría que encerrarnos. Es claramente comercial, pero tratando de corregir los principales defectos de esta categoría. Intentamos que el filme trascienda, que te acuerdes de los personajes cuando salgas de la sala”, explica Gato. Y que, posiblemente, la memoria se mantenga hasta la siguiente entrega. Porque ya están previstos al menos Tadeo Jones 3 y 4. Gato cuenta que "la tercera se está consolidando, pero se puede decir que se hará con casi toda seguridad". Lo cierto es que ya cuenta con los principales financiadores. Y eso, en el cine, es el tesoro más difícil de encontrar.
Colocar el producto en la película
El avión que lleva a Tadeo Jones de Chicago a España muestra de manera inequívoca, y durante un buen rato, a qué compañía pertenece. Tanto que llama la atención. "Tal vez nunca hubiese ocurrido así en una película de animación, pero el product placement [mostrar un producto para colocarlo en la mente del público] siempre ha sido otra técnica de financiación de las películas", responde Enrique Gato.
Babelia
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