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Nueva York ya tiene ‘paraguas’

El US Open estrena cubierta en la central y deja a Roland Garros como el único Grand Slam indefenso ante la lluvia. El techo en la Arthur Ashe ha costado 135 millones de euros y 18 meses de construcción

Alejandro Ciriza
Panormámica de la Arthur Ashe, pista central de Nueva York.
Panormámica de la Arthur Ashe, pista central de Nueva York.Richard Drew (AP)

El tenis es un deporte que históricamente ha obligado a mirar al cielo. De lo que allí arriba ocurra, cuando se revuelve la meteorología y las nubes lloran, depende todo. Si caen gotas, el programa se trastoca: suspensiones, retrasos, despliegue de lonas. Cambios de ritmo de lo más inoportunos que hastían a público, jugadores y organizadores. El agua ha sido un problema endémico que, sin embargo, se ha ido minimizando progresivamente en los grandes torneos. En todos salvo en Roland Garros, porque Australia, Londres y desde este año Nueva York, de estreno, ya cuentan con al menos una instalación que permite hacer frente a las precipitaciones.

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Este año, en Flushing Meadows, están felices e hinchan el pecho. Y es que allí, en el barrio neoyorquino de Queens, ya no dependerán de los caprichos del cielo. Su pista central, la joya del Centro Nacional de Tenis Billie Jean King, reluce como nunca. Todo después de una inversión cercana a los 135 millones de euros y 18 meses de construcción, con 6.000 toneladas de acero de por medio y un conglomerado de vigas y paneles que dan forma a la espectacular cubierta que protegerá a los 23.800 espectadores —más que en ninguna otra pista del planeta— que asisten a los partidos.

“Es fantástico”, sostiene el escocés Andy Murray, dos del mundo; “entrené bajo el techo hace unos días y es genial. Se abre y se cierra muy rápido, así que a partir de ahora no deberían haber demasiados retrasos. Creo que es algo positivo para los tenistas, para la televisión, para los medios en general y también para los aficionados. Es bueno para todos nosotros”, dice el británico, que a su vez bromea porque en esta primera semana del US Open las gotas no aparecen y, de momento, no se les espera: “Apuesto a que este año no llueve”.

La cubierta retráctil supone la culminación a una faraónica obra que abarca todo el complejo. La Asociación Estadounidense de Tenis (USTA) ha abonado 493 millones de euros para cubrir la Arthur Ashe, construir una nueva Grandstand (8.000 espectadores) y renovar la que fue su pista principal hasta 1997 —año en el que se levantó la central actual—, la Louis Armstrong, que en 2018 se reinaugurará, también con una protección en la zona superior. “Ya no importará la lluvia. Hemos ejecutado un plan magistral para finalizar esta gran obra. La edición de este año es realmente histórica”, ensalza orgullosa Katrina Adams, presidenta de la USTA.

* VÍDEO: Así se construyó el techo de la pista Arthur Ashe del Centro Nacional Billie Jean King.

La instalación del techo se ha llevado a cabo sin dejar ningún cabo suelto. En el instante en que se sella se activa un sistema de refrigeración que asegura que la temperatura y la humedad son las adecuadas en el interior. No obstante, hay un aspecto al que no ha podido escapar: los contrastes lumínicos, los claroscuros. “La cubierta es espléndida, aunque a veces tenemos dificultades para golpear la pelota porque conforme se mueve el sol aparecen sombras que antes no existían aquí. Pero es espléndida”, incide Rafael Nadal, siempre meticuloso.

El juez principal del torneo, Brian Earley, es quien tendrá la potestad para determinar el cierre; si así lo hace, el partido que haya comenzado encapotado o bien haya sido interrumpido tendrá que finalizar de la misma forma, bajo formato indoor. Y otro matiz reseñable: a diferencia del Abierto de Australia, donde se puede decretar el cierre de la techumbre si las temperaturas son muy elevadas, en Nueva York no se atenderá a este factor del calor.

Presumen pues en Flushing Meadows de su renovación. Ya no quedan a merced del agua, como tampoco lo están Wimbledon —Centre Court cubierta y la pista 1 a partir de 2019— ni en el complejo de Melbourne Park, que cuenta ya con tres pistas protegidas. Ahora, la excepción apunta a París, donde, paradójicamente, claman al cielo para que las autoridades den licencia a un proyecto de remodelación  que incluya un paraguas para la Philippe Chatrier.

DJOKOVIC, PRESIDENTE DEL CONSEJO DE JUGADORES

Novak Djokovic, número uno del circuito, será a partir de ahora también el presidente del Consejo de Jugadores de la ATP. El serbio, de 29 años, fue elegido portavoz por el resto de los tenistas la semana pasada, en una reunión previa al US Open. Nole tendrá que velar por los intereses de los profesionales hasta junio de 2018, cuando finalice su mandato. “Acepté con mucho gusto. Es una responsabilidad. Por supuesto, voy a darlo todo para contribuir a la evolución de este deporte”, afirmó el de Belgrado, quien ya formó parte de este órgano entre 2008 y 2010.

“En el Consejo todos somos iguales. Fue interesante realmente sentarse, escuchar y hablar, debatir sobre diferentes temas que están en marcha ahora mismo. Nuevas ideas y nuevas perspectivas”, señaló Djokovic, que estará acompañado desde la vicepresidencia por el sudafricano Kevin Anderson; “estamos todos en el mismo barco: la gente del Consejo, la gente de la Junta, y al final, los torneos también… Todos somos parte del mismo órgano de gobierno. Todos somos parte de la misma organización. Todos compartimos la misión de hacer este deporte mejor”.

El Consejo de Jugadores tiene como objetivo conformar una voz única para que el circuito prospere y el tenis mejore en todo lo respectivo al calendario, las infraestructuras, la configuración de los rankings y todo aquello que afecta al desempeño profesional de los tenistas. Cabe recordar que Rafael Nadal ocupó la vicepresidencia del Consejo entre 2008 y 2012, cuando el suizo Roger Federer estaba al frente.

RESULTADOS DE LA 2ª RONDA (31 agosto-1 septiembre)

Cuadro masculino: Rafael Nadal, 6-0, 7-5 y 6-1 a Andreas Seppi; Roberto Bautista, 5-7, 6-2, 6-3 y 6-2 a Federico Delbonis; Nicolás Almagro, 7-6, 6-4 y 7-6 a Pablo Cuevas; Andrey Kuznetsov, 7-5, 6-4 y 7-6 a Albert Ramos; Novak Djokovic, por retirada de Jiry Vesely; Ryan Harrison, 6-7, 7-5, 7-5 y 6-1 a Milos Raonic; Kevin Anderson, 7-6, 6-4 y 6-4 a Vasek Pospisil; John Isner, 6-3, 6-4, 6-7 y 6-3 a Steve Darcis; Jo-Wilfred Tsonga, 6-4, 3-6, 6-3 y 6-4 a James Duckworth; Marin Cilic, 6-1, 6-2 y 6-3 a Sergiy Stakhovsky.

Cuadro femenino: Anastasija Sevastova, 7-5 y 6-4 a Garbiñe Muguruza; Angelique Kerber, 6-2 y 7-6 a Mirjana Lucic-Baroni; Roberta Vinci, 6-1 y 6-3 a Christina McHale; Belinda Bencic, 6-3 y 6-2 a Andrea Petkovic; Caroline Wozniacki, doble 6-4 a Svetlana Kuznetsova; Johanna Konta, 6-2, 5-7 y 6-2 a Tsvetana Pironkova; Petra Kvitova, 7-6 y 6-3 a Cagla Buyukakcay; Catherine Bellis, 2-6, 6-2 y 6-2 a Shelbu Rogers; Madison Keys, doble 6-1 a Kayla Day.

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Sobre la firma

Alejandro Ciriza
Cubre la información de tenis desde 2015. Melbourne, París, Londres y Nueva York, su ruta anual. Escala en los Juegos Olímpicos de Tokio. Se incorporó a EL PAÍS en 2007 y previamente trabajó en Localia (deportes), Telecinco (informativos) y As (fútbol). Licenciado en Comunicación Audiovisual por la Universidad de Navarra. Autor de ‘¡Vamos, Rafa!’.

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