Una vuelta imperfecta lleva a Zarco a la ‘pole’ en Le Mans
El francés saldrá desde la primera posición de la parrilla en su país, donde no ven ganar a un local en la categoría reina desde 1954
La suya no fue una vuelta perfecta. Para viajar a esa velocidad por el circuito Bugatti había que cometer imperfecciones, pelearse con la moto, responder a su bamboleo. Y lo hizo. Claro que lo hizo. Si ya se llevó la pole en Qatar, la primera carrera del año, si ha salido desde la primera fila en cada gran premio desde entonces –segundo en Argentina, Estados Unidos y Jerez–, cómo iba a dejar pasar la oportunidad de marcar la pauta en casa. En Francia. Donde se ha convertido en el ídolo local. Donde no ven a un francés ganar un gran premio de la categoría reina desde que lo lograra Pierre Monneret, en Reims, en 1954. Ni veían a un local llevarse la pole desde que lo hiciera Christian Sarron en Paul Ricard en 1988.
La suya no fue una vuelta perfecta. Camino de aquel último paso por la línea de meta, el crono agotado ya, tuvo un susto en aquella ese que dibuja la última chicane. Pero aun así firmó un tiempo majestuoso. Un nuevo récord para esta pista que tan pocas veces recibe a la caravana mundialista con este sol espléndido, ni una nube en el horizonte. Batió con una vuelta en 1m, 31’185s el récord de Lorenzo (1m, 31’975s) en 2016. Lo hizo en una pista, la de Le Mans, que siempre le sentó como un traje a medida a las Yamaha. Claro que, esta vez, en plena crisis de la fábrica japonesa, las M1 oficiales sufrían para sellar una vuelta rápida (octavo Viñales, a medio segundo; noveno Rossi, a siete décimas) mientras el de Cannes, con una máquina con aquel motor del 2016, volaba.
Se llevó la pole position Zarco con una vuelta imperfecta, como aquellas que acostumbra a hacer Márquez, experto en salvar caídas, como ha hecho más de una vez este fin de semana, maestro en aprovechar hasta los márgenes de la pista, como se vio en esta sesión de clasificación. Apuró los metros de la chicane y se subió a los pianos. Pero no le alcanzó para mejorar el tiempo de su antagonista este curso. Se quedó el de Honda a una décima de segundo. Lo que, por otro lado, es todo un triunfo. Este escenario no se le dio muy bien los últimos años a la fábrica alada, ni tampoco al campeón del mundo, consistente y rápido estos días.
Petrucci, con una Ducati y un contrato por actualizar, se colocó con el tercer mejor tiempo en esa misma primera línea de salida. Tras él, además de Iannone (Suzuki), las dos Ducati del equipo oficial, Dovizioso y Lorenzo, que se quedaron a cuatro décimas.
Crutchlow es trasladado al hospital tras un fuerte impacto
Para acceder a la QP2, donde se deciden las 12 primeras plazas de la parrilla, un grupo de pilotos, aquellos que no pudieron mejorar sus tiempos antes del tercer libre la mañana del domingo, salieron a la pista pasadas las dos del mediodía. Cuando faltaban apenas dos minutos para el final de la sesión, el sol reluciente, el viento fresco, 20 grados en el ambiente, con Petrucci con el mejor tiempo y Pedrosa a dos décimas, Crutchlow sufrió un impacto terrible tras perder el control de su Honda, que le escupió por los aires a la salida de la curva ocho, Garage Vert. El británico intentaba meterse en esa Q2, se estaba acercando al crono de Petrucci cuando, a la salida de aquel viraje, la máquina le hizo un extraño, primero, y acabó lanzándolo violentamente hacia el suelo inmediatamente después.
Crutchlow sufrió un fuerte impacto sobre la parte baja de la espalda y un segundo golpe cuando, ya en el suelo, en el margen de la pista, la moto le alcanzó y le golpeó a la altura del trapecio derecho. Quedó tendido en el asfalto, pidiendo ayuda. La sesión quedaría suspendida cuando el reloj, por cierto, ya decía que aquello había terminado. Los pilotos volvieron al box al tiempo que el de Coventry era evacuado de la zona en ambulancia y llevado al centro médico. Poco después fue trasladado al hospital, donde se le realizarían más pruebas. TIene un fuerte golpe en la cadera.
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