Ambiente enrarecido
El mercado ha presentado a lo largo de las cuatro sesiones de la pasada semana unas características de incertidumbre y escasa espontaneidad que no podemos dejar de señalar.Los índices diarios observaron un comportamiento lineal, con la única excepción del miércoles, donde un dinero de origen no muy claro presionaba sin disimulo al alza un buen número de valores, entre los que se encontraban los de mayor peso específico en la composición del índice.
Estas repentinas apariciones de órdenes compradoras que generan diferencias positivas, para volver a desaparecer con igual celeridad resultan, cuando menos, singulares, y dan una idea, como antes comentábamos, de lo enrarecido del ambiente.
No obstante, no es menos cierto que el negocio en los corros eléctricos ha aumentado y los valores de mayor significación del grupo han movido cantidades de títulos de alguna consideración; -baste como ejemplo los casi 60.000 títulos de Hidrola que se contrataron el miércoles, o los más de 45.000 que se hicieron de Unión Eléctrica en la sesión de cierre semanal.
En el resto de los grupos se mantiene la atonía y los apoyos a valores concretos.
Los bancos han presentado unas posiciones cambiantes, y aunque alguno de ellos afirme la existencia de dinero para sus títulos, lo cierto es que en la sesión de cierre las repeticiones resultaban forzadas, y los propios emisores debían tomar algún título para cubrir el 50% del papel, mínimo legal exigido para poder marcar cambio repitiendo.
Por supuesto, a lo largo de toda la semana los más variopintos comentarios y opiniones sobre la situación política del momento y los posibles resultados de las próximas elecciones han ocupado buena parte del tiempo de los asistentes habituales, detrayendo su atención del desarrollo de las sesiones, que, por otra parte, tampoco presentaban novedades de importancia.
Resultaba también muy comentada la marcha ascendente iniciada por Galerías y que ayer apuntábamos en nuestro comentario, pues la propia sociedad hizo público hace escasas fechas que sus pérdidas se elevaron a 225 millones en el pasado ejercicio, y no obstante día a día gana algunos puntos.
Así, pues, diríamos que ha sido quizá la semana donde se ha puesto de manifiesto de una manera más concreta la acción de los grupos institucionales en apoyo del mercado, que el dinero ha continuado sin hacer acto de presencia y que la oferta ha adoptado posturas expectantes, pero sin desperdiciar las oportunidades de materializar diferencias.
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