Tres mil personas exigen la entrega de unas viviendas por las que pagaron 4.800 millones

Unas 3.000 personas se manifestaron ayer tarde ante las oficinas que tiene la inmobiliaria Promocisa en el parque Estoril, de Móstoles. Los manifestantes, compradores de viviendas que la citada empresa tenía que haber terminado hace meses, exigían la inmediata entrega de sus pisos.El problema surgido en torno a las viviendas de Promocisa afecta a unas 3.200 personas, que manifiestan haber entregado en los últimos cuatro años un promedio de millón y medio de pesetas por unas viviendas que en algunos casos ni siquiera se han empezado a construir. Según este cálculo, las cantidades entregadas a cuenta suman unos 4.800 millones de pesetas.

Estos pisos tenían que ser construidos en Villalba (parque de La Coruña), Torrejón de Ardoz (parque de Cataluña) y Móstoles (parque de Estoril, II y III). Pese a que la empresa se comprometió a entregar los pisos a los dos años de firmar los contratos con los compradores, éstos llevan pagando por término medio cuatro años, y en algunos casos sus futuras viviendas no tienen otra cosa que el solar.

Pese a la elevada cuantía de las cantidades entregadas a cuenta, las obras de las distintas urbanizaciones se han paralizado repetidas veces por dificultades de tesorería. Los afectados temen, por otra parte, que las cuentas especiales que tenía que abrir Promocisa con esas cantidades se hayan utilizado para efectuar pagos ajenos a sus viviendas. A todo ello se añade que una de las empresas que aseguraron la devolución de estas cantidades en caso de que no se construyeran las viviendas se encuentra en situación difícil.

En el transcurso de la concentración efectuada ayer, por iniciativa de las asociaciones constituidas en los parques citados, los manifestantes improvisaron una asamblea en la que tomaron los siguientes acuerdos: continuar las negociaciones con Promocisa en busca de un arreglo; exigir la intervención de la empresa por los acreedores y depositar a partir de abril el importe de las letras mensuales en cuentas especiales. Estos acuerdos se harán llegar a los propietarios de Promocisa, que, según el escrito de los afectados, son Josefa Polo Santamarina, Luis Constantino Jiménez Redondo y Saturnino Davisson. Pese a la elevada cuantía de las cantidades entregadas a cuenta por los compradores de las viviendas, éstos esperan poder resolver satisfactoriamente su problema, ya que el patrimonio de la empresa lo han estimado en torno a los 10.000 millones de pesetas.

En el transcurso de la concentración que empezó a las 5.30 de la tarde y discurrió sin incidentes, los afectados mostraron diversas pancartas, firmadas por sus respectivas asociaciones, en las que podía leerse: «Queremos nuestras viviendas».