Más de un millar de enmiendas al proyecto de Código Penal

Más de un millar de enmiendas han sido presentadas al proyecto de ley orgánica del Código Penal. El plazo de presentación de las mismas finalizó a medianoche. El grupo que más enmiendas ha presentado es el socialista, guiadas por la idea fundamental de volver al texto elaborado por la Comisión General de Codificación, con algunas mejoras técnicas, ya que el proyecto fue modificado en parte por el Gobierno.El PSOE desea que la edad penal sea fijada, cuando menos, en la actual de dieciséis años -el proyecto la fija a los quince-; pretenden la supresión de la reincidencia como agravante genérica, y hacen hincapié en los centros de reinserción social. Se rebaja la duración de las penas, aunque se asegura su total cumplimiento; se introducen novedades como el arresto de fin de semana, un nuevo sistema de multas en función de la capacidad económica del penado, posibilidad de sustituir penas de prisión por otras más livianas y otras medidas.

Los comunistas piden un derecho penal especial para los jóvenes, la limitación a quince años del tiempo máximo de privación de libertad por un solo delito, el perfeccionamiento del sistema de sustitutivos penales, tendente a evitar la reincidencia y la imposición innecesaria de penas.

Asimismo, los comunistas propugnan la restricción de las medidas de seguridad constitutivas de privación de libertad a los supuestos más graves de peligrosidad criminal. Solicitan también la creación de un fondo de garantía para cubrir subsidiariamente los derechos de las víctimas de los delitos contra la vida y la integridad de las personas.

El Grupo Comunista propone la creación de un delito contra la seguridad e higiene en el trabajo, la equiparación del hombre y la mujer como víctimas del delito de violación y abuso sexual, el incremento de las garantías de la libertad de expresión en relación a diversas figuras de delito, la limitación de la figura del robo a los ataques a la propiedad con violencia e intimidación a las personas, la supresión de la figura delictiva de la letra de cambio vacía y restricción de la penalidad contra el derecho de huelga.

Por su parte, el grupo centrista ha anunciado su propósito de enmendar la edad penal mínima, que el proyecto gubernamental fija en quince años y UCD desearía ahora elevar a dieciséis.