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El régimen tailandés resiste aún contra el golpe de Estado

Un comité revolucionario militar dio en la madrugada de ayer un golpe de Estado incruento en Tailandia y anunció la dimisión del Gobierno real, la suspensión de la Constitución y la disolución del Parlamento. La Marina y la Aviación dieron su adhesión a los golpistas. Sin embargo, el general Prem Tinsulanonda, primer ministro, consiguió escapar a la sede del segundo ejército, situada en la meseta de Korat, en el noreste del país (a unos cuatrocientos kilómetros de Bangkok), desde donde lanzó ayer por la tarde un llamamiento, transmitido por radio, en el que afirmó que seguía siendo primer ministro, solicitó la lealtad del Ejército y pidió la rendición de las fuerzas armadas.

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El general Prem aseguró también que la familia real tailandesa se encontraba bajo la protección del segundo ejército. El golpe de Estado, el cuarto que se produce en Tailandia desde hace ocho años, fue ejecutado por el general Sant Chitpatima, de 59 años de edad, comandante en jefe adjunto de las fuerzas armadas y que fue nombrado ayer jefe del Comité Revolucionario. La importancia exacta del respaldo obtenido por el general Sant entre los oficiales del Ejército de Tierra resulta bastante difícil de evaluar. Ninguna personalidad civil o militar ha brindado públicamente su apoyo al general Sant, si se exceptúa al general Serm Nanakorn, viceprimer ministro, nombrado consejero del Comité Revolucionario.Ayer, a última hora de la tarde, el Comité Revolucionario seguía aún sin hacer pública la lista completa de sus miembros y sus comunicados sólo mencionaban a un pequeño número de oficiales, que se habrían adherido al general Sant.

La presencia del rey Bhumibol Adulyadet al lado del general Prem, si se confirma, podría ejercer una influencia decisiva sobre la evolución de la situación.

El soberano, cuyo poder nunca ha sido puesto en tela de juicio por las fuerzas armadas, se encontraba ayer, al amanecer, en el palacio real de Bangkok, donde recibió en audiencia al general Prem, horas antes de que se produjese el golpe.

Si el rey ha abandonado verdaderamente la capital, controlada por el Comité Revolucionario, para unirse al segundo ejército, que sigue siendo fiel al general Prem, Bhumibol Adulyadet ha dado de esta forma una clara indicación sobre sus preferencias.

Oficiales jóvenes "golpistas"

Según informaciones de fuentes, diplomáticas, el tercer ejército, con base en el norte de Tailandia, habría permanecido fiel al general Prem y acaso también el cuarto, estacionado en el sur del país.Fueron principalmente los jóvenes oficiales, comandantes de regimiento y de batallones que pertenecen al grupo denominado los Jóvenes Turcos, de inspiración monárquica y nacionalista, los que dieron el golpe.

Aunque hasta el momento no han definido con precisión su prolama politico, el Comité Revolucionario anunció que «no permanecería más de dos años» en el Poder, que emplearía para solucionar los problemas de Tailandia y establecer las bases de una nueva democracia, según afirmaba un comunicado leido por radio. El comité añadía que había tomado el poder porque los medios parlamentarios habían resultado ineficaces para resolver los problemas del país. Sin embargo, los nuevos dirigentes, que han suspendido la Constitución y disuelto el Parlamento, expresan en el comunicado su confianza en una democracia que sólo funcionará cuando los problemas fundamentales hayan sido resueltos.

El comunicado concluye formulando el deseo de que los patriotas y demócratas tailandeses ayuden al comité en su tarea del establecimiento de un régimen democrático.

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