Concluyen sin éxito los trabajos de la comisión de reforma de la Seguridad Social

31 ene 1982 - 00:00CET

El más absoluto fracaso coronó ayer el trabajo de la comisión para la mejora y racionalización de la Seguridad Social, que, formada al amparo del punto 5.2 del Acuerdo Nacional de Empleo (ANE), se disolvió sin ni siquiera encontrar una filosofía común de entendimiento. Mientras la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) y los sindicatos UGT y CC OO -que junto a la Administración estaban representados en la comisión- se responsabilizaron mutuamente del desenlace negativo, el Gobierno anunció anoche la creación de una comisión de expertos para "definir el problema" de la Seguridad Social.La gota de agua que, según la mayoría de los reunidos, colmó la paciencia que, aparentemente, habían mostrado todos los participantes a lo largo de los meses de difíciles negociaciones fueron las declaraciones publicadas ayer del ministro de Trabajo y Seguridad Social, Rodríguez Miranda, en las que expresaba el deseo de la Administración de posponer en tres o cuatro años la reforma a fondo de la Seguridad Social.

Tanto la representación de los sindicatos como la patronal acusaron al Gobierno de "falta de voluntad política" para concluir los trabajos de la comisión, que, aparte de protagonizar un diálogo de sordos, ni siquiera ha podido ratificar un "informe de síntesis" que había elaborado su presidente, el profesor Fuentes Quintana, para ser presentado al Gobierno.

José María Cuevas, secretario general de la CEOE, fue quizá la voz más beligerante en sus críticas al trabajo de la comisión y al papel desempeñado por su presidente. "El informe mal llamado de síntesis es un auténtico trabajo de corte socialista, y los empresarios, firmes partidarios de la mayor liberalización posible del sistema de Seguridad Social, tenemos que rechazarlo", manifestó Cuevas en una conferencia de Prensa. Por la tarde, José María Zufiaur, representante del sindicato socialista, también se mostró disconforme con el citado informe Fuentes, pero señaló que UGT encontraba elementos positivos en el mismo.

Similares críticas partieron de Julián Ariza, representante de CC OO.

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El Gobierno decidirá sobre la mejora de la Seguridad Social

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Las diferencias entre las tres representaciones en la comisión -Administración, patronal y sindicatos-, partían incluso del objetivo mismo de las negociaciones. Así, mientras José María Cuevas se manifestaba abierto partidario de la "reforma" de la Seguridad Social, sindicatos y Administración se mostraban satisfechos con su "mejora y racionalización".

En este sentido, el documento elaborado por la presidencia de la comisión, bautizado como "informe Fuentes", abrazaba la última tesis y, según quejas de la patronal CEOE, era un trabajo "globalmente negativo".

Para insistir aún más en su posición, la CEOE presentó ayer un documento propio que, sin ni siquiera haberlo facilitado previamente a los miembros de la comisión, tenía como destinatario al Gobierno.

Los representantes patronales justificaron su actitud ante la ausencia en el documento de Fuentes de cualquier propuesta de la CEOE. "Si es de síntesis, tenía que haber incorporado alguna de las nuestras", dijo Cuevas.

El representante de UGT, José María Zufiaur, encontró en esta actitud patronal la "prueba evidente" de que "la CEOE tan sólo prentende privatizar la Seguridad Social".

Para ellos, manifestó Zufiaur a EL PAIS, "su participación en la comisión sólo perseguía un objetivo: rebajar las cotizaciones empresariales y las prestaciones de la Seguridad Social y buscar una caja de resonancia para privatizarla".

Ariza, como portavoz de los negociadores de CC.OO, calificó a la CEOE de "obstrucionista" en los trabajos y dijo que el Gobierno careció, en todo momento, de voluntad política para llegar a un entendimiento, aparte de ser ambiguo en todos sus planteamíentos.

La nota del Gobierno

A última hora de ayer, el ministerio de Trabajo y Seguridad Social, en una nota, rechazó los argumentos contenidos en las críticas del resto de negociadores y reafirmó "su voluntad de cumplir en los más estrictos términos el Acuerdo nacional sobre el Empleo".

La nota reconoce, sin embargo, que fue imposible encontrar formulas de aproximación, "tanto respecto a lo manifestado por las distintas partes como en relación al documento integrador presentado por el presidente señor Fuentes Quintana".

Tras el fracaso y desaparición de la comisión, cuyos trabajos quiso inutilmente prolongar el Gobierno hasta el martes, en un esfuerzo para presentar otro documento, la tarea de "mejorar y racionalizar" la Seguridad Social queda en manos de la Administración, que expreso su intención de formar una nueva comisión -esta vez, de expertos- "para el estudio tanto de los problemas de la Seguridad Social en su momento presente como su definición futura".

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