La comisión senatorial española empieza a investigar

La comisión senatorial de investigación sobre la desaparición de súbditos españoles en países de América ha empezado a trabajar, y en un plazo de entre dos y cuatro meses elaborará un informe, en el que intentará aclarar la suerte de decenas de personas con nacionalidad española, probablemente secuestradas y ejecutadas por motivos políticos en Argentina y, eventualmente, en otros Estados latinoamericanos con régimen dictatorial. El informe será sometido al pleno del Senado para su aprobación y su alcance tendrá, sobre todo, un valor moral y simbólico. Constituida el miércoles pasado bajo la presidencia del senador socialista por Sevilla Francisco Moreno Franco, de 33 años de edad, la comisión mantuvo veinticuatro horas después un primer encuentro informal con el embajador de España en Buenos Aires, Manuel Alabart Miranda, con algunos responsables socialistas uruguayos. Las comparecencias formales empezarán a principios de febrero, cuando el director general de Iberoamérica del Ministerio de Asuntos Exteriores,- Carlos Miranda, acuda ante la comisión, seguido después por organizaciones humanitarias, como la Comisión Española para la Defensa de Desaparecidos y Detenidos en América Latina y por eminentes abogados como José María Mohedano, Antonio Massip y hasta, acaso, el propio Joaquín Ruiz-Giménez. Paralelamente, una delegación de las Madres de la Plaza de Mayo, encabezada por la presidenta de la asociación, Elena de Bonafini, llegará a. España en los primeros días del mes próximo para testimoniar ante la comisión senatorial, y hasta entrevistarse con Felipe González, si el presidente del Gobierno español accede a su petición de audiencia. El primer documento de trabajo de la mesa de los comisión será la lista de 32 desaparecidos elaborada por el Ministerio español de Asuntos Exteriores en base a datos facilitados por la representación diplomática, de España en Buenos Aires. Pero el propio embajador, Manuel Alabart Miranda, reconoció ante la comisión senatorial que era "necesario actualizarla". "Aunque es el censo más fiable del que disponernos necesita ser puesto al día porque, a medida que desaparece el miedo, salen a luz nuevos casos", declaró a EL PAÍS Francisco Moreno, que, además de presidente de la comisión, es el secretario de la agrupación provincial del PSOE en Sevilla. En total, según declaró en noviembre Alabart al diario bonaerense La Nación, 167 denuncias habían sido registradas entonces en la Embajada de España en Argentina sobre casos de desapariciones de ciudadanos españoles o de origen español, que, una vez expurgados por los servicios consulares, quedaron reducidos a 32 personas, por cuya suerte se interesó el Gobierno de Madrid. Las estimaciones sobre el número total de desaparecidos a causa de la represión política oscila entre 9.000 y 30.000, según las fuentesEl palacio de Santa Cruz sostiene, sin embargo, que su Embajada en la capital argentina "ha realizado gestiones a favor de una serie de ciudadanos ( ... ) de origen español aplicando, con un criterio muy amplio, los límites del derecho de protección diplomática", y a pesar de que "las autoridades argentinas han hecho ver en todo momento que tales personas son ciudadanos argentinos a todos los efectos". Estas versión es, sin embargo, frecuentemente desmentida por los relatos de los familiares de desaparecidos descendientes directos de españoles.El Ministerio de Asuntos Exteriores era absolutamente reacio a dar a conocer la famosa lista de 32 personas y fueron necesarias para conseguirlo varias interpelaciones del senador socialista por Valencia Alfons Cucó, quien consideraba injustificada la argumentación oficial sobre los problemas que podría causar a la política exterior española la publicación del elenco en el Boletín Oficial del Estado (BOE). "Creo que ahora el Ministerio distingue perfectamente entre los papeles del ejecutivo y del legislativo", afirmó Moreno Franco.

Experiencias similares

En sus trabajos la comisión se inspirará de las experiencias similares de los Parlamentos de Italia y Alemania Federal, que también se interesaron por sus, respectivamente, cerca de 300 y 42 súbditos desaparecidos. La comisión española acabará, casi con certeza, siguiendo el ejemplo de sus homólogos italianos, y viajará a Buenos Aires, como ellos lo hicieron en diciembre para recabar más información.

"Pero esto sólo se hará", precisa Moreno Franco, "una vez agotados todos los cauces de trabajo en España y cuando la comisión disponga de una información sólida que le permita sacar el mejor provecho de su viaje y le evite caer en errores que puedan servir de coartada al régimen militar".

El nuevo Gobierno se muestra dispuesto a tratar de esforzarse por resolver este espinoso asunto, y el Ministerio de Asuntos Exteriores estudia la posibilidad de que España tome una iniciativa similar a la del Gobierno de Italia, cuyo ministro de Asuntos Exteriores, Emilio Colombo, anuncio hace una semana ante el Parlamento de Roma que planteará la cuestión de los desaparecidos italianos el mes próximo en Ginebra durante la 391 sesión de la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, informó la Oficina de Información Diplomática.

"El drama de los desaparecidos en Argentina afecta a toda la comunidad internacional y, por tanto, debe ser planteado a la Asamblea de las Naciones Unidas", dijo Colombo el pasado lunes.