La orden de cañonear al 'Valle de Atxondo' fue tajante, afirma un oficial marino francés

Uno de los oficiales de la fragata francesa Lieutenant de Vaisseau Lavallee, que el pasado jueves abrió fuego contra dos pesqueros vascos, declaró ayer al programa radiofónico Onda pesquera que tanto él como la tripulación del buque no querían disparar con su cañón de proa contra las embarcaciones españolas, pero que la orden recibida desde su base naval fue tajante en ese sentido.Según el oficial, la orden de la base naval señaló que disparasen, en primer lugar, varias rágafas de ametralladora contra el casco del Valle de Atxondo, y que si éste no se detenía dispararan tres obuses de carga hueca contra el casco del pesquero para lograr hundirlo. En el mismo mensaje de su base naval se les ordenaba que no dispararan sobre el casco del Burgoamendi. El oficial dijo ignorar las causas de esta orden. El mandato de disparar partió del primer ministro francés, Pierre Mauroy, a través de su consejero militar (véase EL PAIS de ayer).

"Inmediatamente después de cumplir nuestra orden de disparar sobre el Valle de Atxondo", señaló el oficial francés, "nos dispusimos a prestar al pesquero toda la asistencia posible y comunicar al Burgoamendi que quedaban detenidos y tenían que acompañarnos al puerto de Lorient".

El oficial francés señaló, de igual modo, que la operación había sido establecida para dar un escarmiento definitivo a los pesqueros españoles, ya que éstos, en su opinión, no hacen caso de los acuerdos internacionales y se adentran en aguas francesas para pescar sin licencia ni permiso. "En caso de repetirse la presencia del algún barco pesquero español sin licencia en aguas comunitarias", subrayó el oficial, "repetiremos exactamente la misma operación".

Los patrones del Valle de Atxondo y del Burgoamendi serán juzgados en la Sala de Justicia de Lorient el próximo jueves. Las autoridades francesas les acusan de desobediencia militar, de intento de fuga, de intento de abordaje a un buque de la Armada y de pescar sin licencia.

Los diarios franceses, excepto uno, no se publicaron ayer, domingo, debido al descanso semanal que guarda la Prensa en ese país. Por tanto, no se produjeron reacciones generales en los medios de comunicación escritos respecto de la visita a España realizada por Pierre Mauroy.