La corrupción y México
Le ruego me permita expresar por este medio mi más firme protesta por la emisión, el martes 9 del actual, por televisión, del programa titulado México: la sombra de la corrupción, que presenta una imagen unilateral de aquel país totalmente negativa. Es cierto que la plaga de México ha sido la corrupción de sus clases gobernantes, pero eso lo heredaron los mexicanos de, la colonia en que los funcionarios allí destinados desde España se enriquecían en cuatro o cinco años a costa del erario público y de la explotación de los indios. México no es sólo corrupción, como parece deducirse del citado documental, aunque tenga algunas palabras amables para aquel pueblo, como España no son sólo los asesinatos de los abogados laboralistas de la calle de Atocha ni la muerte a palos de un joven por derechistas en el parque del Retiro, ni los bárbaros asesinatos de los terroristas vascos y de los GRAPO, pan nuestro de cada día. Yo he vivido en México durante 30 años como refugiado político y no tengo más que recuerdos maravillosos de la acogida que nos dio aquel país, del trato humanísimo y de la ayuda en todo momento que nos prestaron. Allí nació mi segunda hija y tres de mis cuatro nietos, donde siguen viviendo.México ha dado dos figuras políticas de primer orden que hubiéramos querido tener en España: Benito Juárez, el presidente que luchó y acabó con la invasión francesa de las tropas de Napoleón III, y Lázaro Cárdenas, el presidente que repartió las tierras entre los campesinos y nacionalizó el petróleo que estaba en manos norteamericanas, británicas y holandesas. México ha dado escritores de talla internacional como Alfonso Reyes, Juan Rulfo y Octavio Paz; pintores como Orozco, Rivera, Siqueiros y Tamayo; músicos como José Revueltas y Carlos Chávez, y, ya en tiempos de la colonia, allí nacieron y se formaron nada menos que Juan Ruiz de Alarcón y sor Juana Inés de la Cruz. Puedo asegurarle que el teatro que se hace en México es superior al de España, y que la independencia de su política internacional para nosotros la quisiéramos.
México merece mayor respeto, aunque tenga grandes defectos, como los tienen todos los pueblos del mundo, pero sus virtudes y méritos son muchos más que aquéllos. Televisión Española tiene que presentar otro documental que haga justicia a un país en pleno crecimiento y con una extraordinaria personalidad.-
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