La armada y la fuerza aérea argentinas justifican, como hizo el Ejército, la 'guerra sucia'

Los estados mayores de la armada y de la fuerza aérea argentinas remitieron el jueves a la Cámara Federal de Apelaciones, que juzga a las tres primeras juntas militares de la dictadura, los informes solicitados por la defensa del general Roberto Viola, de contenido casi idéntico al enviado por el Ejército de Tierra y que, en definitiva, viene a justificar la guerra sucia.

Las fuerzas armadas pretenden demostrar que en el momento de producirse el golpe de Estado del 24 de marzo de 1976 existía en Argentina un estado de verdadera guerra interna con dos bandos beligerantes. De aceptarse esa interpretación de las causas que impulsaron a los militares, primero a dar el golpe de Estado y luego a desatar la más indiscriminada y brutal represión que se recuerde en toda la historia del país, se justificaría la llamada por ellos guerra sucia contra la subversión, un "conflicto bélico" en el que era "difícil" reconocer al enemigo y por eso "hubo que actuar en su terreno y con sus mismas armas".En la introducción de la carpeta que el Ejército agregó a la documentación enviada a la Cámara de Apelaciones -sin previo conocimiento del Ministerio de Defensa, hecho que provocó el cese fulminante del general Carlos Cerdá, auditor del Estado Mayor- se aclara que la polémica sobre si el pueblo fue actor o testigo del fenómeno subversivo "está favorecida por una incomprensible capacidad de olvido hacia todo aquello que ensombreció la historia de la patria en sus tradiciones e ideales más puros". Y sostiene que, según la doctrina del Ejército vigente en 1970, la guerra es un conflicto de violencia variable entre bloques de naciones o grupos organizados que buscan imponer su supremacía.

Este razonamiento es el que le permite al Ejército suponer que Argentina se enfrentó a un enemigo "con un aparato militar de envergadura". En esa extensa introducción se afirma, además, que "en servicio de la patria y del Estado, el Ejército puso a disposición sus medios y los empeñó gradualmente en estricta relación con la amenaza hasta lograr el supremo objetivo que la nación le imponía".

La fuerza aérea, considerada la menos comprometida con la represión, ha utilizado nueve fólios para responder a las preguntas del defensor de Viola. Destaca el concepto de "guerra revolucionaria" tras una etapa "clandestina" y otra "abierta".

Un reportaje con Firmenich

Los abogados defensores de los principales acusados, los generales Videla, Viola, Galtieri; los almirantes Massera, Lambruschini, Anaya, y los brigadieres Agosti, Graffigna y Lami Dozo, van a incorporar al expediente de sus pruebas el reportaje que Gabriel García Márquez le hizo al dirigente montonero Mario Firmenich en Cuba y que fue publicado en la revista italiana L'Expresso.El escritor acaba de confirmar Ia veracidad de esas declaraciones, donde Firmenich decía que libraba una guerra.