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Un empleado de correos de EE UU amenazado de mata a tiros a 14 personas en una oficina postal

Un empleado de correos a quien el martes pasado le habían anunciado que podía ser despedido si no mejoraba la calidad de su trabajo, irrumpió ayer en una oficina postal de Edmond, pequeña ciudad de 25.000 habitantes situada en Oklahoma (Estados Unidos), y abrió fuego contra los empleados y clientes de la misma, matando a 14 personas e hiriendo a otras seis antes de suicidarse disparándose un tiro en la boca. Se trata de la matanza con más víctimas cometida en Estados Unidos por una sola persona desde el 18 de julio de 1984, cuando 21 personas fueron asesinadas en el restaurante McDonald's de San Isidro (California).

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Patrick Sherrill, de 44 años, ex combatiente en la guerra de Vietnam, donde sirvió cuatro años, penetró ayer con dos armas automáticas en la oficina postal en la que trabajaba, por una puerta trasera, y comenzó a disparar sobre las 80 personas, entre empleados y clientes, que se encontraban en aquel momento en el local. Según fuentes policiales, Sherrill dirigió en un primer momento sus disparos hacia los empleados de la oficina de correos y después hacia los clientes. En el momento en que la policía, una hora y media después de que hubiese comenzado la matanza, penetró en el edificio, se encontró con el cadáver de Sherrill, que se había disparado un tiro en la boca. Uno de los testigos del suceso, Vince Furlong, declaró que Sherrill había cerrado con llave las puertas de la oficina de correos para impedir que la gente pudiese salir. "Creí que alguien había arrojado al suelo una caja de seguridad. Después alguien gritó que en la oficina había un pistolero, y todo el mundo se puso a correr en todos los sentidos", explicó un empleado, Ron Blackwell.Varias personas consiguieron huir por alguna puerta que había quedado abierta. Uno de los empleados se refugió en la caja fuerte de la oficina postal, y otros dos consiguieron salvar sus vidas escondiéndose en el despacho de los inspectores de la oficina.

Los helicópteros de la policía comenzaron a sobrevolar el lugar de la matanza, y los agentes llegaron a la oficina postal unos 15 minutos después de que comenzase el tiroteo. Coches de las fuerzas de seguridad rodearon el edificio impidiendo el paso a la gente y trataban de hablar por teléfono con Sherrill, pero éste rechazó responder a sus llamadas.

Intentos infructuosos

Tras varios intentos infructosos de entablar contacto con Sherrill, las brigadas de asalto de la policía decidieron penetrar en el edificio valiéndose de la llave que les entregó uno de los inspectores de la oficina postal.

Cuando los policías entraron en la oficina, descubrieron una auténtica carnicería. "Nunca había visto nada semejante", declaró el procurador del distrito, Bob Macy. Una de las víctimas fue hallada en un aparcamiento para coches situado en la parte posterior del edificio.

Sherrill había permanecido cuatro años como marine en Vietnam en la década de los años sesenta, cuando lo normal era que sólo se prestara servicio un año, lo que induce a pensar que se enrolaba voluntaria y sucesivamente.

El martes, un día antes de que perpetrase la matanza, los responsables de la oficina de correos habían advertido a Sherrill de que podía ser despedido si no mejoraba la calidad de su trabajo en la oficina, donde prestaba sus servicios desde hacía un año y medio.

Las dos armas que utilizó en el asesinato masivo fueron una pistola de 9 milímetros y otra de 45. Según los testigos, Sherrill, con gran calma, recargó las dos pistolas para poder seguir matando. Al penetrar la policía en la oficina de correos, las dos pistolas estaban sin munición. Al parecer, el veterano de Vietnam se encontraba en libertad condicional por estar acusado de varios delitos.

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