Antonio Maya, condenado a 32 años de cárcel por el asesinato del dueño de un bar
La Audiencia de Granada ha condenado a Antonio Maya, alias el Marce, a 32 años de cárcel por un delito de asesinato y otro de tenencia ilícita de armas. El Marce, de 27 años y padre de tres hijos, mató en 1981, de un disparo en la cabeza, al dueño de un bar de Granada. Maya está acusado también de la muerte de dos guardias civiles.
Audiencia Provincial ha desestimado la calificación de robo con homicidio en la muerte de Eduardo Cuevas, propietario del bar Montemar, de Granada. El Marce, acompañado de su amigo Antonio Gómez Torres, penetró en el bar Montemar la noche del 30 de agosto de 1981. Gómez Torres entró primero pretextando comprar tabaco. Con posterioridad apareció Maya, armado con una pistola con la que encañonó al propietario del establecimiento, quien al hacer un leve movimiento, recibió un disparo a bocajarro en la cabeza, que le produjo la muerte instantánea.Los jueces han absuelto a Antonio Gómez, ya que no se ha demostrado que conociera la intención de su compañero de perpetrar el atraco. Una de las balas disparadas por Maya se alojó en el vientre de Gómez Torres, que quedó tendido en el suelo y fue trasladado a un centro sanitario. Más tarde, confesó la identidad del autor de los disparos.
En los próximos meses se celebrará otro juicio que Antonio Maya tiene pendiente por la muerte de dos guardias civiles. Antonio Maya, que cumplía reclusión en la cárcel de Granada por la muerte de una persona ocurrida en 1983 en Cataluña, logró escaparse de la penitenciaría el 30 de noviembre de 1985, tras dar muerte a los guardias civiles Antonio Bailón y Ramón López, que se encontraban de vigilancia. Siete días después, El Marce fue localizado tendido sobre el tejado de la casa de su madre, en el polígono de Cartuja, un barrio deprimido de las afueras de Granada. Unos 200 agentes rodearon la manzana para que no huyese y fue detenido.
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