Menos,turbulencia y cierre entonado
Aunque aún parece pronto para echar las campanas al vuelo, los mercados de valores han recobrado el pulso tranquilo que perdieron recientemente ante el acoso de las realizaciones de plusvalías. La buena absorción demostrada por el mercado y el discreto aumento de las tomas de posturas a los mejores precios de cada corro son los fundamentos argüidos por los bolsistas, que no se resignan a contemplar un índice en baja. Sin embargo, los volúmenes de contratación se han situado en la zona inferior de la banda, que comprende de los 20.000 a los 30.000 millones de pesetas efectivas en acciones, dato que apunta necesariamente hacia la contracción de una de las dos partidas en litigio.De ser, como parece, el papel el que se bate en retirada, cabría la posibilidad de que el mercado retornase a una dinámica marcada por cierto predominio de los compradores, puesto que aún queda en el alero la variable supuestamente halagüeña de los masivos vencimientos de pagarés del Tesoro. En todo caso, la mañana de ayer discurría entre leves flexiones de buena parte de los valores industriales más calientes y la suave oscilación de los pesos pesados del parqué.
Con todo, los bancos, por ejemplo aún no han conseguido recuperar el buen tono genérico, tal y como se esperaba, limitándose la alegría a distribuirse en forma de salpicaduras irregulares y en ningún caso uniformes.
Telefónica intentó mejorar sus posiciones sin conseguirlo, aunque nadie duda a estas alturas de que pueda hacerlo en un futuro próximo, y más si se solucionan, las cosas en los mercados extranjeros; esta consideración parece ser la causa del aporte de oferta a su corro durante las semanas precedentes. Las siderúrgicas también han evolucionado con suma irregularidad.
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