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300 agentes ilegales provocan la mayoría de fraudes inmobiliarios en Alicante

JOAQUIM GENÍS, Responsables de la Administración y de los sectores económicos vinculados al negocio inmobiliario reconocieron ayer la existencia de fraudes y estafas en la costa alicantina, tal como había denunciado en un informe el eurodiputado británico Edward McMillan-Scott (véase EL PAÍS del lunes). No obstante, consideraron que el informe "está desenfacado" y que en ocasiones son los propios compradores quienes no toman las mínimas cautelas a la hora de realizar su inversión.

La mayor parte de los fraudes se producen cuando los intermediarios son intrusos, en su mayoría extranjeros que no tienen detrás organismo oficial alguno que respalde su gestión como vendedores de viviendas. "Aunque todavía se dan casos de estafas, el fenómeno es cada vez menor y la mayoría de denuncias se refiere a actuaciones pasadas en las que ni había tanto control ni el sector de la construcción operaba con las garantías de ahora", afirman fuentes inmobiliarias.De todos modos, el informe del eurodiputado McMillan ha irritado a varios sectores en Alicante, donde su iniciativa se ha calificado como "algo desproporcionado y electoralista", según Enrique LLopis, presidente del Colegio Oficial de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (COAPI). Para Llopis, el informe señala la costa alicantina como uno de los mayores puntos de estafas porque aquí tiene su sede el Instituto de Propietarios Extranjeros, una sociedad anónima que dirige Per Svenson, que en los últimos años ha venido recogiendo las quejas de los exranjeros en este campo.

Fuentes de la patronal consideran que el nivel de fraude "no es tan alto como se quiere dar a entender". "Lo que pasa", añaden, "es que la actividad del sector conoce un gran auge y siempre hay desaprensivos, pero los estafadores son la excepción, cada vez más reducida".

Los agentes de la propiedad inmobiliaria reconocieron ayer que actualmente operan en Alicante alrededor de 300 falsos agentes, de los que algo más de la mitad son extranjeros. "Algunos", comenta Carlos Barreras, captan a sus clientes en el bar y utilizan su condición de extranjeros para dar mayor seguridad a los compradores de sus países que, en ocasiones, realizan las operaciones con dinero obtenido de forma irregular". Fuentes del COAPI evalúan en más de 40.000 millones de pesetas las operaciones realizadas sin control, lo que supone un fraude fiscal anual del orden de 3.600 millones de pesetas en Alicante.

Fuentes del sector financiero vinculado a la construcción mostraron su preocupación por el informe Mc Millan, al que consideran "parcial y desenfocado" y recuerdan que la financiación de las promociones inmobiliarias "se realiza mediante certificaciones trimestrales de obras ya ejecutadas, por lo general con nuestra garantía". En su opinión, "muchos de estos fracasos y engaños se producen por ignorancia de las leyes y la falta de un buen asesoramiento".

República bananera

"No se puede negar que se produzcan todavía algunas estafas", comenta Virginio Fuentes, gobernador civil de Alicante, "pero hay gente que todavía nos considera una república bananera y no toma las mínimas precauciones que sí adoptaría en su país de origen". Virginio Fuentes lamenta que se quiera vender esa falsa imagen de nuestro país en el exterior y asegura que éste no es un problema que preocupe a los miles de residentes extranjeros.

"Acabamos de hacer una encuesta entre los consulados de países de la CE", dice, "y no aparece en ningún momento este tema". Los extranjeros están preocupados, según esta encuesta del Ministerio del Interior, por la deficiencia de los se rvicios, la falta de infraestructura urbanística, los impuestos y el aumento de las plusvalías.

Cuando el pasado año Mac Millan visitó Alicante autoridades y responsables inmobiliarios le reprocharon su proximidad con Per Svenson y el Instituto de Propietarios Extranjeros.

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