Viajes Meliá someterá a aprobación de la junta general reducir y ampliar simultáneamente capital

Viajes Meliá, la agencia de viajes controlada mayoritariamente por el financiero italiano Giancarlo Parretti, someterá a aprobación de sus accionistas el día 30, en Valencia, llevar a cabo una operación acordeón (reducción y ampliación simultánea de capital). Ayer, Parretti y Florio Fiorini comparecieron ante la Audiencia Nacional en Madrid para responder ante sendas acusaciones de evasión de capital y estafa a los accionistas de Renta Inmobiliaria.

La operación de acordeón es una medida -utilizada habitualmente para sanear el balance de las sociedades-, forma parte de los planes de relanzamiento de la empresa, según el consejero Luis Peña. Entre los planes de la sociedad, cuyo capital actual es de 5.000 millones de pesetas, se incluye una nueva estrategia de marketing y el lanzamiento de nuevos productos. En la operación de reducción-ampliación de capital, y con el mismo objeto de sanear la sociedad, Viajes Meliá, incluirá una emisión de obligaciones cuya suscripción se ofrecerá a los empleados de la compañía. La emisión se someterá también a aprobación de los accionistas. La cuantía total de la operación diseñada rondará los 6.000 millones de pesetas, según su consejero Luis Peña.Viajes Meliá, sociedad adquirida en 1986 a José Meliá por el financiero italiano Giancarlo Parretti, tiene unas deudas totales "de unos 4.000 millones de pesetas" según afirma el mismo directivo.

El pasado domingo, directivos de la compañía se reunieron con los directores de sucursal de la empresa. En el transcurso del encuentro, siempre según Peña, "se realizó una consulta o comentario" sobre la posibilidad de que los empleados de la agencia de viajes suscribieran la emisión de obligaciones que proyecta la dirección.

Otras fuentes directivas de la sociedad, que no quieren ser identificadas, aseguran que Viajes Meliá atraviesa un momento delicado, con pérdidas más elevadas que las reconoce Peña y un futuro que, según afirman, pasa por la venta de la agencia de viajes.

Los rumores de la posible venta de la sociedad por parte de Giancarlo Parretti no son nuevos. La participación -mayoritaria- de Parretti en Viajes Meliá fue pignorada en 1990 con el banco galo Crédit Lyonnais como un medio para conseguir créditos con los que el financiero hizo frente a la adquisición de la compañía cinematográfica MGM-Pathé. El pasado julio hubo fuertes rumores sobre la posible venta de la participación por parte del Crédit Lyonnais.

La reducción y ampliación simultánea de capital en Viajes Meliá estaba proyectada para el pasado mes de junio. En aquella ocasión, la junta general no se pudo celebrar por la negativa de la firma auditora Peat Marwick a respaldar la auditoría de la sociedad mientras no tuviera datos sobre la situación financiera del grupo de empresas de Parretti. En este sentido conviene recordar que la mayor parte de las acciones de Viajes Meliá se encuentran en poder de otra sociedad del grupo (Corporación Viajes Meliá) que, a su vez, es filial de Meliá Internacional NV.

Precisamente ayer, el financiero italiano Giancarlo Parretti y su ex socio Fiorio Fiorini comparecieron ante la Audiencia Nacional para responder de sendas acusaciones de evasión de capital (16.000 millones de pesetas pertenecientes a Renta Inmobiliaria) y de estafa a los accionistas de esa compañía por una supuesta sustracción de patrimonio. La denuncia fue planteada en su día por la Asociación para la Defensa del Accionista.

En sus declaraciones, Giancarlo Parretti y Fiorio Fiorini aseguraron que esos 16.000 millones de pesetas están en Renta Inmobiliaria. Parretti negó que haya roto con Fiorini.