Medidas polémicas
El Real Madrid ha tomado una serie de decisiones de alto riesgo en las últimas temporadas. Estas medidas han provocado un debate interno en el seno de la directiva del club. La polémica se inició con la rescisión del contrato de Bernd Schuster y la salida del club de Martín Vázquez. La desmembración de la quinta del Buitre provocó un conflicto en el aspecto psicológico del equipo y la pérdida del mayor talento joven del club. En este contexto, la marcha de Schuster del Madrid y la grave lesión de Milla produjeron un fortísimo debilitamiento de la columna vertebral del equipo.El despido de Schuster un mes después de que ganara el Madrid su última Liga fue la primera decisión polémica de una cadena que se ha prolongado dos años. Mendoza optó por prescindir del alemán tras oír insistentemente entre su corte de consejeros que estaba "acabado" y que era "demasiado viejo" para seguir rindiendo.
La marcha de Schuster unida a la de Martín Vázquez, que dejó el equipo por problemas económicos, agudizó la crisis interna. John Toshack dió la voz de alarma poco después de comenzar la temporada 1990-91. Tres meses después el galés, salió por la puerta de atrás.
El binomio Di Stéfano-Camacho abrió una nueva polémica. Ambos sumieron al equipo aún más en el caos. En plena vorágine electoral, Pedro Zapata, directivo de Mendoza y en esos momentos rector del club, llamó a Radomir Antic. Mendoza, con la continuidad asegurada tras el refrendo popular, eligió a Pacho Maturana para ocupar el banquillo. El colombiano llegó incluso a firmar un precontrato y aconsejó a Mendoza sobre algunos fichajes. Al final, el presidente madridista, "aconsejado por los técnicos", según la versión oficial, confirmó a Antic.
Pero Antic, al inicio de la presente temporada, comenzó a oir ruido de sables. Mendoza, en La Coruña, tras caer el, Madrid en el Teresa Herrera se entrevistó con Leo Beenhakker. Manuel Fernández Trigo, gerente madridista, puso al entrenador holandés en el camino del presidente de Madrid. Mendoza soñó con el Madrid de las remontadas, revivió las cinco Ligas consecutivas y pensó en darle otra oportunidad a Beenhakker. De nuevo los técnicos, según la versión oficial, recomendaron a Mendoza el cambio. Nadie se acordó de la noche del 5-0 en Milán. Beenhakker dejó un vestuario hundido. Ahora tampoco ha sido capaz de revivirlo.
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