Más de 5.500 personas se quedan en paro cada día en la Comunidad Europea y Estados Unidos
Los trabajadores son los que más van a notar el impacto de la crisis. Las filas del desempleo contarán ya este año con 30 millones de parados en los países de la OCDE. En la Comunidad Europea, según un estudio interno de la Comisión, no se crea empleo neto cuando el ritmo de crecimiento económico queda por debajo del 2,5%, lo que va a ocurrir tanto este año como en 1993. Según distintos organismos, más de 5.500 personas quedaron en paro cada día en la CE y EE UU en el periodo de julio de 1991 a julio de 1992. En España, en el primer semestre de este año el paro aumentó diariamente en 1.200 personas, según la encuesta de población activa.
Unas 5.540 personas pasaron a engrosar las filas del desempleo cada día durante el año comprendido entre julio de 1991 y julio de 1992 (últimos datos disponibles) entre la Comunidad Europea y Estados Unidos. El aumento del paro en la CE afecta a unas 2.600 personas al día, según datos de Eurostat, y en EE UU a casi 3.000, según datos de la OCDE. El desempleo se convierte así en la factura más dolorosa de la crisis y afecta incluso a los países más ricos como Alemania o Francia. Este aumento del desempleo ha echado por tierra en un solo año los avances para reducir el paro logrados en los cinco ejercicios precedentes.El impacto en el paro de un descenso en el ritmo de crecimiento económico ha sido cuantificado en un estudio interno de la Comisión Europea, según el cual no se crea empleo neto en la CE cuando la economía crece menos del 2,5%. Con esta estimación y las bajas previsiones de crecimiento para éste y el próximo año, el problema del paro no ha hecho más que empezar.
De momento, el disparo del desempleo es tal que el Fondo Monetario Internacional elevó considerablemente sus previsiones de desempleo para este año y para 1993 en la Asamblea anual de septiembre, respecto a los avanzados en primavera. La OCDE hará otro tanto con las suyas en la reunión que mantendrá en París el próximo 9 de noviembre. Con la última previsión del FMI, uno de cada 10 trabajadores de la Comunidad Europea estarán en paro a finales de 1992. Al concluir el primer semestre, esa proporción era del 9,4%, un punto más que en 1990.
En los 24 estados miembros de la OCDE había 28 millones de parados en 1991 y a finales de 1992 esa cifra llegará, al menos, a 30 millones. Los países donde más aumenta el desempleo son también los que más dificultades están encontrando para salir de una crisis que ya es claramente una recesión. En EE UU, por ejemplo, el paro llegará al 7,5% de la población activa, dos puntos más que hace dos años, y en el Reino Unido ya se acerca al 11%, desde el 7% de 1990.
Los sectores más afectados son los que tienen una estructura más rígida. Por ello, la industria soporta un mayor aumento del paro que los servicios, dónde se dan altibajos de contratación según la evolución económica.
Un problema añadido, según un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), es que el desempleo se ha mantenido en niveles muy elevados en los países industrializados incluso en los momentos de mayor crecimiento durante el último lustro. La OIT pone corno ejemplo que "en los años siguientes a la II Guerra Mundial, los gobiernos de Europa occidental se sentían amenazados cuando el desempleo subía por encima del 2%; hoy parece imposible en muchos países mantener el desempleo por debajo del 6%".
En este sentido, los informes de organismos internacionales como la OCDE o el FMI destacan las subidas salariales como causa de esta dificultad para reducir el desempleo.
La OIT añade que el miedo al paro ha fomentado la contratación temporal. "Los que buscan trabajo están en una posición más débil y por ello los empleadores pueden ofrecer trabajos menos interesantes". Como factor adicional apunta que "al intensificarse la competencia internacional, puede ser necesario que muchos empleadores eviten los costes de una plantilla de personal fijo".
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