Racionalismo y espiritualidad libre

La carta del señor G. Valdecasas, publicada el pasado día 30, me da pie a algunas reflexiones.Es cierto que asistimos últimamente, en el medio televisivo, a un incremento de las parafernalias -en sentido estricto- de videntes, astrólogos que ofertan estudios a precio de saldo, supuestos sanadores, etcétera. Pero del tono de su carta se desprende que lo que le irrita realmente no son esas parafernalias (que, por cierto, a mí sí que me molestan mucho), sino que alguien pueda pensar que detrás de toda esa espuma se esconden cosas importantes... En definitiva, lo que parece irritarle de veras es el interés serio que suscitan hoy temas tales como la astrología, la alquimia, los fenómenos de sincronicidad, la mística y todo lo que tiene que ver con la espiritualidad libre (o sea, no castrada por la religión / institución). Pues bien, deseo puntualizar algunas cosas:

a) Que el 90% de los fundadores de la ciencia moderna se interesaron por las disciplinas de tradición hermética, en especial por la astrología. Esto es cierto no sólo en el conocido caso de Kepler, sino también en los de Copérnico,

Tycho Brahe, Galileo, Miguel Servet, Newton y un largo etcétera.b) Que casi todos los padres de la física moderna (relativista y cuántica) tuvieron -y cultivaron, además- inquietudes místicas heterodoxas. ¿Nombres? Espero que bastará con los de Einstein, Bohr, Heisenberg, Pauli, Eddington y Schrödinger, porque no se trata de hacer la lista interminable.

c) Ya sé que referirse a determinados sabios que han estado -o ahora mismo están- abiertos a las dimensiones no racionales del conocimiento no, demuestra nada. Porque no pasa de ser una apelación de autoridad y, evidentemente, pueden estar todos ellos equivocados. Sin embargo, sí que me parece suficiente para pedirles a nuestros crispados racionalistas que se corten un poco..., que dejen de utilizar en sus filípicas ese agrio tono descalificador que ha llegado a ser el habitual; y que dice tan poco de la confianza que tienen en la validez exclusiva de su pensamiento racional.-