Millones de ojos nos contemplan

Termitas, cucarachas, ratas, murciélagos, toda clase de insectos, gorriones, golondrinas, cigüeñas, y también halcones peregrinos, águilas imperiales y lobos son los protagonistas de una nueva serie documental que Televisión Española estrenará en abril. Fauna callejera, dirigida y presentada por el naturalista Luis Miguel Domínguez, consta de 12 episodios, en los que analizan las relaciones entre casi 60 especies animales y el hombre en el entorno urbano. Madrid, Barcelona, Valencia, León, Burgos, Tarifa y Sevilla son algunos de los escenarios de la producción."La serie se ha rodado estrictamente en las ciudades. Toda la biodiversidad que encontramos en el campo, en la ciudad es inferior", explica Luis Miguel Domínguez, "pero con todo, hemos rodado entre 50 y 60 especies distintas de animales silvestres que habitan en la ciudad". Excluyendo, por supuesto, a los animales domésticos.

Más de 250 horas de grabación componen el material con el que el equipo del programa realizará los 12 capítulos, que durarán media hora. La música de la serie -realizada por José Simó- ha sido compuesta por Francis Amat.

El equipo de Fauna callejera lo forman 20 personas, entre ellas tres naturalistas: Pedro García, José Luis Fuentes y Manuel Fernández. "Hemos empleado técnicas de cine, pero en vídeo, con un director de fotografía, lo cual es ciertamente innovador en un documental como éste. También hemos empleado la macrofotografía para filmar cómo las polillas se comen una manta", afirma el director.

Algunas de las imágenes de que forman esta serie recogen las actividades de una colonia de cotorras de pecho gris argentinas establecida en la Diagonal de Barcelona; el paso de la cigüeña blanca por España -camino de África-, que utiliza la catedral de León como punto de reunión; los cernícalos primilla que habitan los tejados de Cáceres, adonde acuden en primavera para reproducirse; el interior de un nido de avión común, cuyo tamaño es similar al de una taza de café; las pautas de comportamiento de las ratas en las alcantarillas y de las cucarachas en las cañerías; los murciélagos que habitan los escondrijos de las fachadas de las casas; las térmitas que viven en el casco viejo de Bilbao,...

Dos grillos en la Gran Vía

También se ha filmado el comportamiento sexual de los gorriones -uno de los grandes protagonistas de la serie-; los amoríos de los grillos en una jardinera de la Gran Vía madrileña; un nido de lechuza común en un nicho vacío del cementerio de Valencia; una cópula aérea de vencejos; y un dormidero de lavanderas blancas en la carretera de circunvalación M-30 de Madrid, entre otras imágenes de la fauna urbana.

Casi la totalidad de las secuencias se han rodado en sus escenarios naturales. Solamente para algunos temas, como algunas pautas de comportamiento de las ratas y las cucarachas, se han construido decorados. "Lo importante ha sido siempre rodar a los animales sin afectar ni dañar su intimidad, y para eso hemos tenido que trabajar con mucho cuidado y utilizando técnicas que son de siempre del cine científico, de naturaleza, pero trasladadas a la ciudad", dice Luis Miguel Domínguez. "Hemos querido demostrar que existe otra ciudad, que no estamos solos, que millones de ojos nos contemplan y que debemos ser más animales de lo que somos. Que la ciudad es un lugar donde se puede disfrutar con una metodología naturalista que vale igual para el parque de Doñana o para la selva amazónica".