VaIdano exige la máxima concentración

., Sencillo, pero peligroso. No es una contradicción. Es la experiencia. El Madrid se enfrenta hoy al Dinamo de Moscú (TVE, 17.15) con la ventaja del honorable resultado del encuentro de ida (2-2) y con el recuerdo del resbalón ante el Compostela. Jorge Valdano ha exigido a sus jugadores la máxima atención. El técnico madridista quiere el mejor Madrid posible frente a un rival que tiene fama de jugar mejor fuera de casa. La alineación será la misma que presentó Valdano ante el Zaragoza, con la única novedad de Butragueño en el puesto de Raúl.

Lo dijo Valdano hace algunos días: "Los jugadores del Madrid no pueden distraerse dos minutos para pensar en la novia". Venía a cuento del empate con el Compostela, un partido que su equipo se tomó con demasiada suficiencia.

La experiencia señala que los equipos rusos disponen de buenos jugadores y de una manera singular de llevar los partidos. Es un ritmo peculiar, difícil de digerir por los conjuntos occidentales. Cuando los partidos se vuelven desagarrados, muy vitales, las posibilidades de subsistencia de los rusos son escasas. Su flotador está en el ritmo falso, en el aprovechamiento de las caídas de tensión de los rivales. El Madrid tuvo una mala experiencia en este sentido frente al Spartak de Moscú en la edición 90-91 de la Copa de Europa. Después de un empate en el partido, disputado en Moscú, se relajó con un temprano gol de Butragueño. Se ablandó tanto que permitió la recuperación de los rusos. Ante la incredulidad general, el Spartak ganó en el Bernabéu y eliminó al Madrid. Lo mismo sucedió en el célebre patinazo del Barcelona ante el CSKA hace dos temporadas.

Durante las últimas horas, Valdano ha pedido a sus jugadores la máxima intensidad. No quiere concesiones de ningún tipo. Pondrá a su mejor equipo, con la única novedad de Butragueño, que disputará su primer partido como titular en el Bernabéu. Hasta ahora ha visto pasar por delante a Alfonso, Zamorano, Dubovsky, Amavisca y Raúl, un trago difícil para el jugador más carismático que ha tenido el Madrid en los últimos años. Butragueño asume su condición actual con resignación. "Tengo que estar preparado para cualquier decisión. En la vida se pasan por todas las etapas posibles. Tuve una situación de privilegio y ahora, me toca estar en la otra acera. No es algo que me ocurra a mi únicamente. He visto a muchos jugadores importantes en la misma situación", señaló ayer tras recibir la noticia.

El partido llega después de dos resultados adversos. Sin embargo, la satisfacción por el juego desplegado en La Romareda es general. Todos los jugadores coinciden en señalar que el único problema ante el Zaragoza fue la falta de precisión en el área. Por lo demás, el equipo se siente seguro.