Los veterinarios rechazaron cuatro 'miuras'
Diecinueve toros —de ellos, nueve de Eduardo Miura— hubieron de reconocer los veterinarios para aprobar los seis y dos sobreros de la corrida delebrada el pasado domingo en la Maestranza. De los nueve miuras rechazaron cuatro, tres por falta de trapío y uno por claudicación de sus extremidades traseras.
Los veterinarios rechazaron también por falta de trapío uno de los tres toros presentados por el Conde de la Maza y los dos que reconocieron de Viento Verde. La corrida se compuso, finalmente, con cinco toros de Miura y uno del Conde de la Maza, que fue devuelto al corral antirreglamentariamente, al romperse un cuerno.
La información ha sido facilitada por la Delegación de Gobernación de la Junta de Andalucía, que facilita puntualmente a los medios de comunicación las incidencias que le incumben respecto a todas y cada una de las corridas de la feria sevillana. El mencionado organismo ha impuesto varias sanciones a lo largo del ciclo, envió a análisis vísceras de dos de los toros de una de las corridas ante el extraño comportamiento que tuvieron en la plaza, pero llama la atención que no se haya enviado prácticamente ningún asta a examen de laboratorio, cuando la tónica de la feria ha sido que saltaban a la arena las reses con las cabezas sospechosamente cornicortas y astigordas.
"Falta de trapío"
De todas maneras, los veterinarios de muchas plazas rechazan por "falta de trapío" toros que presentan síntomas de manipulación fraudulenta de sus pitones. Con esta fórmula evitan que el ganadero pueda ejercer su derecho de obligar a que se lidie el toro supuestamente afeitado bajo su responsabilidad, previsto en el reglamento vigente.
En la misma corrida del domingo, la autoridad propuso para sanción al banderillero Ángel Majano, de la cuadrilla de Oscar Higares, por provocar que el sexto toro derrotara en el burladero, a consecuencia de los cual se rompió el cuerno izquierdo por la cepa. Asimismo al puntillero, Lebrija, por desobediencia manifiesta, al marcharse del callejón antes de ser arrastyrado el sexto toro.
Terminado el festejo —sigue informando la Delegación de Gobernación— Óscar Higares fue atendido en la enfermería de la plaza de contusiones en tórax y esternón, además de puntazo corrido en el muslo izquierdo. El pronóstico de los médicos es reservado, en tanto se someta al torero a examen radiológico.
Babelia
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