_
_
_
_
Tribuna:LUTO POR UN MITO DE LA FIESTA
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

El número uno

Luis Miguel Dominguín fue más torero de toreros que de aficionados, aunque entre estos últimos tuvo numerosos partidarios incondicionales. Le consideraban el número uno y el propio diestro se proclamó asimismo número uno en el transcurso de una de sus polémicas actuaciones en Madrid.Muchos aficionados no le perdonaron lo que consideraban injustificable intemperancia, pero esta animadversión no hizo daño alguno al torero; antes al contrario convenía a su industria, ya que prodigaba gestos audaces que perfilaban su personalidad polémica. Se ha dicho de Luis Miguel Dominguín que fue un genial "relaciones públicas" de sí mismo y, efectivamente, siempre era centro de los comentarios del gran público por los más dispares motivos, frecuentemente. marginales a la actividad taurina.

Más información
Muere Dominguin, la última estreIla del toreo

Nunca se sabrá, sin embargo, que dimensión artística hubiese alcanzado Luis Miguel Dominguin de dedicarse exclusivamente a su profesión, porque atesoraba unas condiciones excepcionales. Torero de casta, heredero de la torería que demostró su padre Domingo Dominguín en la década de los años 20, se ejercitaba en el oficio desde la infancia y constituyó un caso singular de precocidad, ya. que sólo tenía. 15 años cuando Domingo Ortega le dio la alternativa en el coso colombiano de Bogotá.,

Su concepción del arte de torear fue más técnica que inspirada. Torero largo, calificaban a Dominguín. Y cifrando. en la ejecución estricta de los cánones su propósito de dominio sobre las reses, adquirió una hegemonía que nunca tuvo fin, porque nadie logró superarle durante los años que estuvo en activo. La competencia que mantuvo con Antonio Ordóñez registró algunos rasgos de rivalidad perofue más literaria que cierta. En realidad Luis Miguel Domimguín competía con todos pues no daba cuartel a nadie y llevaba siempre la ventaja de su torería. innata, que se traducía en aquella "difícil facilidad" característica de su toreo, posiblemente fruto de la influencia del maestro por antonomasia, Domingo Ortega, con quien solía compartir cartel.

Lidiador completo en todos los tercios, incluido el de banderillas, sólo le faltaba demostrar que dominaba igualmente la suerte de varas, e hizo esta exhibición una tarde en la madrileña plaza de Carabanchel, llamada La Chata. La imagen del torero vestido de luces y picando al toro en lo alto y por derecho fue al día siguiente portada de todos los periódicos. Y sirvió también para que sus detractores le dieran un nuevo nombre: "El número uno... y pico".

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_