La presidenta serbia de Bosnia revela que las huestes de Radovan Karadzic pretendían tomar Banja Luka

La presidenta serbobosnia, Biljana Plavsic, anunció ayer una conspiración del partido gobernante de su propio territorio, dirigido en la sombra por Radovan Karadzic, para tomar la ciudad de Banja Luka sin reparar en procedimientos ni en vidas. La fecha habría sido el martes 9 de septiembre, coincidiendo con la visita de Momcilo Krajisnik, el copresidente de Bosnia por parte serbia, y de su plana mayor, que junto con una falange de guardaespaldas fueron retenidos en el hotel en que se hospedaban por fuerzas leales a Plavsic.

ENVIADO ESPECIAL"El plan era ocupar las sedes de la presidencia y la policía. Por eso las tropas de la OTAN requisaron un auténtico arsenal a la gente de Krajisnik y en los autobuses que traían a la ciudad a sus partidarios y los de Karadzic para manifestarse", declaró la presidenta serbia.Según la presidenta, Krajisnik le aseguró el lunes que ninguno de sus simpatizantes llevaba "ni un solo cuchillo". Plavsic precisó que la decisión de desestabilizar la mayor ciudad serbobosnia y baluarte de la oposición a los extremistas de Pale se tomó durante el Fin de semana pasado en una reunión del comité ejecutivo del SDS, el ultranacionalista partido gobernante, presidida por el propio Karadzic, pese, a su proscripción política. La presidenta ha pedido a los serbobosnios que elijan el sábado y el domingo a sus cargos municipales sin dejarse influir por los llamamientos radicales para boicotear los comicios.

Aunque fue disuelto formalmente por Plavsic el 3 de julio, el Parlamento de partido único de Pale continúa reuniéndose y adoptando disposiciones. Anoche, los diputados del SDS decidieron finalmente acudir a las elecciones del 13 y 14 de septiembre, después de aplazar la sesión en espera de los resultados de una entrevista en Belgrado entre su jefe Momcilo Krajisnik y el presidente serbio, Slobodan Milosevic.

Visita de Westendorp

A la capital serbia acudieron ayer, por segunda vez en una semana, el plenipotenciario civil Carlos Westendorp y su adjunto el general Jacques Klein, que dirigió el martes las negociaciones de Banja Luka, para intentar de nuevo que Milosevic obtuviera de sus protegidos del otro lado del Drina el sí del principal partido serbobosnio a las primeras elecciones municipales que se celebran en Bosnia en siete años.

Tras más de cinco horas de conversación, Westendorp de claró su abierto optimismo. Entre otras concesiones, a los serbobosnios se les ha garantizado que no habrá en los colegios electorales detenciones de presuntos criminales de guerra. En su comparecencia ante los periodistas, Plavsic no ahorró críticas al papel de Slobodan Milosevic en el enfrentamiento de la República Serbia, sugiriendo abiertamente que Karadzic y sus acólitos están recibiendo instrucciones de Belgrado.

Solemne y pausada, la ex colaboradora íntima de Karadz¡c y ahora frontal enemiga del presunto genocida, al que sirvió como vicepresidenta durante la guerra, y de su entorno -a los que acusa de corruptos y totalitarios- explicó que Krajisnik le exigió el lunes en Banja Luka, en presencia del jefe de la Iglesia ortodoxa serbia, arzobispo PavIe, que renunciara a la presidencia.

En una fracasada y tensa negociación para poner fin al cisma serbobosnio, Plavsic propuso sin éxito que la televisión de Pale, brazo propagandístico de Karadzic, y la de Banja Luka, pasada al bando de la presidenta, ofrecieran sus telediarios en días alternos.

Krajisnik dijo estar dispuesto a dimitir como copresídente de Bosnia en representación de los serbios si Plavsic aceptaba retirarse. Apoyada decididamente por las tropas occidentales en Bosnia en su desafío a los halcones de la República Srpska, Plavsic se comprometió ayer en la defensa de los acuerdos de paz de Dayton -"que no podemos utilizar selectivamente, a nuestro antojo, como quiere Pale"- y acusó a los dirigentes radicales serbobosnios de tratar a su pueblo "corno a payasos".

También descalificó al jefe del Estado Mayor serbobosnio, general Pero Colic, "que no está cumpliendo su papel constitucional". Colic, nombrado por ella en su calidad de comandante en jefe del Ejército, ha tomado partido públicamente por el ala radical. La firmeza de la presidenta coincide con la advertencia de Washington de que las fuerzas de la OTAN intervendrán más decididamente si continúa el abierto sabotaje de una facción serbobosnia al balbuceante proceso de normalización.

El lunes, las fuerzas de la OTAN interceptaron con gran despliegue las carreteras que conducen a Banja Luka para impedir la llegada de alrededor de un centenar de autocares con seguidores de Karadzic, muchos armados y entre ellos algunos policías camuflados.

El martes, Krajisnik y su séquito fueron retenidos en su hotel por la policía leal a Plavsic, y las tropas internacionales, con una decena de tanques. Krajisnik y los suyos pudieron abandonar la ciudad al anochecer bajo protección de la OTAN.