El irresistible encanto de un campus universitario

Las instalaciones universitarias se han convertido en un irresistible objeto de deseo para los alcaldes de la región. Hasta hace apenas una década, toda la actividad de los estudios superiores se centraba en la capital, con la ilustre excepción de la veterana Universidad de Alcalá. Desde que la Carlos III nació para cubrir las aspiraciones universitarias de Getafe y Leganés, la tendencia ha cambiado espectacularmente: un campus sirve para "contaminar" cualquier ciudad de cultura -la expresión es del rector de la Autónoma, Raúl Villar-, y los munícipes están dispuestos a ceder cuanto terreno sea preciso para hacerse un hueco en el mapa universitario regional. La rentabilidad (política, económica y social) está asegurada.Así las cosas, la Complutense se comprometió hace sólo dos meses a instalar los centros de Medio Ambiente y Turismo en Boadilla del Monte; San Fernando de Henares ya ha reservado suelo para un nuevo campus de la Universidad de Alcalá, y Colmenarejo se ha convertido en la avanzadilla de la zona norte para la Carlos III. Aranjuez aspira a sumarse a esta nómina de municipios privilegiados, una condición que ansía desde que firmó su primer convenio con Villapalos, allá por 1993.

Otros municipios del noroeste regional se han beneficiado de la reciente proliferación de centros privados. La Alfonso X el Sabio -que tuvo como primer rector al hoy director general de Universidades, Vicente Ortega- encontró acomodo en Villanueva de la Cañada, un municipio que también puede servir como sede para un segundo proyecto: la nueva tentativa de la institución SEK tras el fiasco de hace un año en Aranjuez, un plan que aún está pendiente de aprobación.

Cerca de allí, en Villaviciosa de Odón, se ha asentado la Universidad Europea-CEES, un centro de actualidad por sus guerras internas en el accionariado, los despidos y convulsiones sindicales y la aún reciente comparecencia de su rector, Juan Salcedo, ante la Asamblea de Madrid. A aquella sesión, en la que Salcedo defendió las bondades de sus instalaciones frente a la opinión del PSOE y de IU, la alcaldesa de Villaviciosa, Pilar Martínez (PP), asistió expectante entre el público sin poder reprimir las expresiones de disgusto cuando arreciaban las críticas. "Me da lo mismo que la universidad la conduzcan unos u otros", apuntó la regidora. Y razonó: "Lo importante es que una institución así genera recursos, negocios enfocados al público universitario y puestos de trabajo en el propio campus. ¿Cómo no voy a estar interesada?".