Una inauguración polémica

El consejero Manuel Tarancón decidió inaugurar el curso en uno de los escenarios de la polémica, precisamente el colegio María de Icíar, argumentando su estrategia de realizar "una política educativa sin complejos". La decisión, desaconsejada incluso en su propio entorno político, le costó entonces un aluvión de críticas de fuerte calado entre la opinión pública. Pero, además, activó una serie de recursos ante el Tribunal Superior de la Comunidad Valenciana, primero por parte de CC OO, que elevó la protesta a los partidos Esquerra Unida y PSPV. La denuncia fue seguida por el STEPV y UGT, que anunciaron que revisarán los conciertos caso a caso. La oposición, por su parte, pidió la comparencia de Tarancón para que explique a las Cortes tan polémica decisión. La comparecencia, prevista para ayer, se aplazó a la próxima semana. El escándalo que desató el hecho de que la Administración del PP hubiera consignado en los presupuestos 690 millones para financiar los nuevos conciertos, sólo para el primer cuatrimestre, coincidió además con niveles de improvisación en el inicio de curso en la red pública que se saldaron con la denuncia de bancarrota de 17 institutos de Alicante, a los que Educación debe el pago ordinario de los gastos de funcionamiento de mayo a agosto pasado.