La policía describe a Ricardo Guerra como "violento" y navajero

Manuel Iglesias, jefe policial de la llamada sección de Tribus Urbanas de Madrid, describió ayer a Ricardo Guerra -acusado del asesinato del seguidor de la Real Sociedad Aitor Zabaleta- como un joven "violento" y de ideología nazi adscrito a Bastión, la sección más radical del Frente Atlético. Iglesias, durante el juicio que se celebra en la Audiencia de Madrid por este crimen, recordó que Guerra ha sido detenido en varias ocasiones por atacar con navaja.

Iglesias destacó que Guerra, tras atacar a sus víctimas en otras agresiones, solía deshacerse de la navaja, arrojándola al suelo, para evitar ser detenido con ella. La navaja con la que fue acuchillado Aitor la halló la policía poco después del crimen -el 8 de diciembre de 1998- en el suelo, al lado del estadio Vicente Calderón. Iglesias no dudó en imputar al grupo Bastión la agresión que sufrió ese día junto al estadio un grupo de seguidores de la Real Sociedad que iban a asistir a una partido entre su equipo y el Atlético de Madrid. El agente corroboró, asimismo, las declaraciones prestadas por el testigo protegido número 2 en el sentido de que "el verdadero organizador de todo fue Miguel Ángel Marcos Bueno, alias El Tocho". Esta persona, a quien se atribuye la fundación de Bastión, está encausado, junto a otros 10 supuestos miembros de este grupo, por desórdenes públicos y asociación ilícita. También es la persona que, según manifestó el citado testigo, se dedicó antes del crimen de Aitor a reclutar a seguidores del Frente Atlético con vistas a dar un escarmiento a aficionados de la Real Sociedad.

También prestó declaración ayer el jefe de la unidad policial que cargó contra los ultras atléticos cuando éstos se abalanzaron sobre los seguidores donostiarras. "Fue una emboscada, muy bien coordinada, en la que los atacantes salieron a la vez y desde distintas calles", detalló.