España participará en el proyecto de un tren de alta velocidad en Egipto

Satisfechos del buen clima político bilateral, pero deseosos de intensificar las relaciones económicas, el presidente del Gobierno español y el jefe del Estado egipcio se reunieron ayer para empezar a traducir las palabras en hechos. Al concluir la entrevista, José María Aznar anunció que España va a financiar el estudio de viabilidad del tren de alta velocidad entre El Cairo y Alejandría, en la costa del Mediterráneo. Por su parte, Mohamed Hosni Mubarak aseguró que el Parlamento de su país ratificará en breve el protocolo financiero con España.

"Se trata de un proyecto de mucho interés para Egipto", explicó Aznar tras anunciar que el Fondo de Estudios de Viabilidad analizará la conveniencia de construir una línea de alta velocidad entre El Cairo, la capital de Egipto, y Alejandría, la segunda ciudad del país. En total, 200 kilómetros que el actual tren express salva en poco más de dos horas.El objetivo último de las autoridades egipcias es que la alta velocidad se extienda a lo largo de todo el valle del Nilo, desde Asuán hasta la costa mediterránea, pero la magnitud de la obra (1.100 kilómetros) requiere que se aborde por etapas. La mejora de las comunicaciones interiores en un país tan extenso (su superficie es de casi un millón de kilómetros cuadrados, el doble que la de España) es uno de los retos a los que se enfrenta Egipto a la hora de ampliar una de sus principales fuentes de ingresos: el turismo. Una actividad que se vio seriamente afectada en años anteriores después de que grupos terroristas islámicos perpetraran atentados que acabaron con la vida de decenas de turistas. Uno de estos atentados se cometió en uno de los lugares más visitados de Egipto: el Valle de los Reyes.

El presidente del Gobierno español mencionó este terreno del turismo como uno de los campos en los que desea que se incremente más la cooperación. Aznar calificó de "escaso" el intercambio comercial entre España y Egipto, que ascendió a 600 millones de dólares (unos 108.000 millones de pesetas) el pasado año.

"Estamos interesados en que los empresarios españoles inviertan en Egipto", manifestó Aznar en el transcurso de la conferencia de prensa conjunta. "Hay potencial para que se incrementen las inversiones y las relaciones comerciales", añadió antes de anunciar que se está trabajando en acuerdos concretos en los sectores de hidrocarburos, petróleo y desarrollo de infraestructuras.

Aznar recordó, no obstante, la necesidad de que el Parlamento egipcio ratifique el protocolo financiero firmado con España en 1998 y que pone a disposición de Egipto 310 millones de dólares en créditos muy favorables. Mubarak aseguró que el paso por la Cámara se producirá "en breve" y obtuvo el compromiso de Aznar de "un nuevo protocolo de mejora de las inversiones".

Protección de inversiones

La parte española también ha expresado a Egipto la necesidad de que ratifique el acuerdo para evitar la doble imposición y el de protección de inversiones, instrumentos básicos para animar al empresariado.

Prueba del impulso que se quiere dar a las intenciones expresadas ayer, el jefe del Ejecutivo español anunció la reunión, el próximo enero en Madrid, de la Alta Comisión Mixta Hispano-Egipcia. También señaló que el ministro de Asuntos Exteriores, Josep Piqué, viajará a El Cairo en las próximas semanas.

Mubarak había visitado por la mañana el Palacio de las Cortes y el Ayuntamiento de Madrid, y almorzó luego con José María Aznar.

El presidente egipcio fue recibido en la Cámara baja por la presidenta del Senado, Esperanza Aguirre, y por la del Congreso, Luis Fernanda Rudi, quien afirmó que Egipto constituye un "factor clave" para la paz y la estabilidad en Oriente Próximo, al tiempo que animó a Mubarak a proseguir sus esfuerzos en favor de este proceso. El presidente egipcio regresa hoy a su país.