El tramo de autovía Igualada-Santa Maria del Camí entrará en funcionamiento este mes
Tras años de litigios y malestar a causa de los accidentes, las obras se acabarán en pocos días
En los últimos días se han dado pasos de gigante. Los vehículos han podido circular por un carril en cada sentido durante los dos fines de semana de la operación salida de agosto, lo cual ha dado fluidez y seguridad al tráfico. Desde entonces, en la autovía de la Nacional-II, los operarios alternan los trabajos en las diferentes calzadas restringiendo la circulación a una de ellas. Pero todo está casi listo.
El portavoz de la plataforma Autovia Ara, Josep Ortiz, manifestó ayer que el tramo 'ya se puede inaugurar el día que quieran porque prácticamente está acabado'. La vía ya está asfaltada, y pintada toda la señalización horizontal. Los trabajos se centran ahora en la colocación de las vallas de los márgenes. Si las obras no han finalizado en las próximas dos semanas, está previsto que el Ministerio de Fomento vuelva a abrir un carril por cada calzada durante la operación de regreso de vacaciones a finales del mes de agosto, tal como ya sucedió en la operación salida.
Mientras, los trabajos avanzan a buen ritmo en el tramo entre Cervera y Santa Maria del Camí, el último que queda por convertir en autovía. A finales de la semana pasada, las máquinas empezaron a trabajar en los terrenos donde el ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, colocó la primera piedra de las obras el pasado 23 de julio, después de 10 años de retraso motivado por litigios judiciales sobre el trazado. Las protestas de la plataforma Autovia Ara y del alcalde de Cervera por la falta de actividad constructora días después del acto protocolario del ministro, han dado paso a la esperanza y a la ilusión de que se cumplirán los plazos fijados.
Álvarez Cascos anunció que el primer tramo entre Cervera y Vergós podría entrar en servicio en la próxima primavera. Por su parte, la finalización completa de las obras y, por tanto, la conversión definitiva de la Nacional-II entre Cervera e Igualada en autovía está prevista para finales de 2003 o principios de 2004.
En los últimos años, las demandas e impugnaciones de propietarios contra las expropiaciones han sido unas de las principales causas de la lentitud del proceso burocrático previo al inicio de las obras. Otro punto de enfrentamiento entre la Administración y los vecinos de las localidades por las que pasa la autovía ha sido la inseguridad viaria de la zona. Los vecinos han denunciado la lentitud del Ministerio de Fomento, mientras en el trayecto tradicional, la carretera N- II, se producían innumerables accidentes de circulación.
En los últimos cuatro años han perdido la vida en este tramo que une Igualada con Santa Maria del Camí más de 70 personas en accidentes de circulación.
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