Dos nuevos pollos de quebrantahuesos nacen en el centro de cría de Cazorla

La recuperación del quebrantahuesos, una especie desaparecida en los montes andaluces en los años 80, está siguiendo un proceso mucho más rápido del esperado. En apenas 15 días han nacido dos nuevos pollos en el centro de cría en cautividad Guadalentín de Cazorla (Jaén). El último de ellos, que vio la luz el pasado día 5, se va a trasladar a Viena (Austria) por falta de parejas adoptivas en el centro jiennense, que cuenta únicamente con dos parejas con capacidad reproductora. Medio Ambiente tiene previsto soltar los primeros ejemplares de esta ave rapaz en la sierra de Cazorla en la primavera de 2005.

La consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, se felicitó ayer de los resultados obtenidos en el centro Guadalentín de Cazorla, inaugurado en 1996 con la llegada de los dos primeros quebrantahuesos jóvenes. "Es el más importante de Europa de cría en cautividad", destacó la consejera. El número de ejemplares ha ido aumentando paulatinamente hasta los 21 quebrantahuesos (12 machos y nueve hembras) existentes en la actualidad. La mayoría de ellos fueron cedidos por la fundación responsable del proyecto de reintroducción en los Alpes.

Tras el nacimiento, el 27 febrero de 2002, del primero de los pollos, bautizado con el nombre de Andalucía, el pasado 19 de febrero nació el segundo de la pareja formada por Cabús, un macho cedido por la Generalitat de Cataluña y procedente del Pirineo, y Corba, hembra procedente del zoo de Berlín. El tercero nació la semana pasada fruto de la reproducción entre el macho Joseph (del zoo alemán de Dresde) y la hembra Zumeta (de origen suizo).

La consejera destacó que más de 10.000 personas (entre escolares, profesores, asociaciones, guardas, jueces, fiscales y otros colectivos) han participado hasta ahora en el plan de sensibilización social ejecutado por la fundación Gypaetus y cuyo objetivo es preparar el terreno para las posteriores sueltas. No obstante, Fuensanta Coves advirtió que Andalucía es la comunidad que presenta una mayor mortandad de fauna silvestre por intoxicación derivada del uso de venenos.

De otro lado, la fundación Gypaetus está utilizando a buitres leonados como ensayo de reintroducción dentro de un estudio comparativo sobre sistema de marcaje en grandes aves rapaces para poder aplicarlo posteriormente en el plan del quebrantahuesos. El proyecto consiste en la decoloración de determinados grupos de plumas de estas aves para que puedan ser identificados a distancia gracias a los diferentes códigos que se les implante.