"Estudio a los rivales, pero con Raúl nunca sabes"

Sander Westerveld (28 años) llegó a la Real Sociedad en pleno desasosiego en la portería. Se perdió la confianza en Alberto, el portero clásico, y se fracasó con la apuesta del sueco Mattias Asper. Wersterveld era la solución, con el pedigrí del Liverpool en la solapa y la escuela holandesa en su hoja de servicios. Pareció un fiasco, un jugador cohibido, desentrenado y con el público de uñas. Ahora vive en la gloria: da asistencias de gol, con la mano y con el pie, ha parado dos penaltis cruciales (en Balaídos y en el Calderón) y ha dejado de hacer la estatua en los disparos lejanos. El Madrid le pone hoy a prueba.

Pregunta. La temporada pasada era un villano y en ésta se ha convertido en un héroe. ¿Tanto ha cambiado usted en poco tiempo?

"Mi estilo en las faltas es el de Roberto Carlos: fuerte, directo y con los ojos cerrados"

Respuesta. El primero fue un año difícil para mí. Firmé en diciembre y sólo tenía media temporada, con un nuevo equipo y una nueva táctica, algo bastante difícil para un portero. Yo hablo mucho durante los partidos y, claro, en esas condiciones y sin conocer el idioma, resultaba muy difícil. Y como venía del Liverpool, mucha gente pensó: 'Éste es un gran portero, un fenómeno, y todo está resuelto'. Además jugábamos en la zona baja de la tabla. Todo eran contrariedades. Esta temporada todo ha cambiado: estoy en mejor forma y sólo necesitaba ganar yo un partido, parar un par de penaltis (como ocurrió ante el Celta y el Atlético). Además físicamente me encuentro muy bien porque hay que tener en cuenta que cuando llegué a la Real llevaba tres meses sin jugar en el Liverpool.

P. Hacía mucho el tancredo en los disparos lejanos y no salía, vivía bajo el larguero.

R. Siempre tengo mucha confianza en mí, pero también estaba jugando con mucha presión. Eso me hizo pensar: 'no voy a salir muchas veces, porque no quiero cometer errores'. No podía hablar en el campo, no quería salir... No era Westerveld.

P. Ahora parece más contento y más atento.

R. Ahora hablo suficientemente bien el español y eso me ha ayudado mucho. Ahora puedo hablar con los jugadores durante, antes y después de los partidos. Yo necesito comunicarme y por fin lo puedo hacer. También es importante que dispongamos de Schurrer, un jugador con muchísima experiencia.

P. Por cierto, ¿quién le ha enseñado a golpear el balón como lo hace, con tanta violencia y tanta dirección?

R. Nadie, nadie. A los 15 años ya mandaba el balón más allá del medio campo. Nunca he trabajado de manera especial esta circunstancia. Lo que notaba es que cada año la mandaba un poco más lejos. Luego, te das cuenta de que cuando dispones de un delantero grande, como Kovacevic, este tipo de jugadas son buenas y ya hemos conseguido varios goles así. En el Liverpool ocurría algo parecido, porque teníamos a Heskey. Pero también me gusta sacar largo con la mano porque siempre se ejecuta mejor que con el pie y te permite realizar un contragolpe. Prats, el portero del Betis, también tiene muy buen disparo, pero él no dispone de un delantero como Kovacevic para aprovechar esas jugadas.

P. ¿No ha pensado lanzar faltas, como ya hiciera Prats, durante un partido?

R. ¿Como Chilavert? No, no. En el Liverpool lanzaba faltas en los entrenamientos, pero en un partido es muy peligroso. Quizás yo pudiera hacerlo en partidos menos importantes, faltando cinco minutos y ganando 3-0. O en la pretemporada o en la última jornada, con todo ya conseguido. La verdad es que sí me gustaría e igual lo intento, aunque tenemos muy buenos lanzadores de faltas. Ahora necesitamos ganar y punto. Eso es lo importante. Por eso, si vamos perdiendo 0-1 y quedan unos pocos minutos tengo muy claro que me voy a rematar un córner, pero lanzar faltas... Habrá que esperar.

P. ¿Con la Real no practica el lanzamiento de faltas en los entrenamientos?

R. En los entrenamientos tiro penaltis y lo que haga falta, porque no hay presión.

P. ¿No resultará que tira a colocar?

R. No, mi estilo es el de Roberto Carlos o Koeman. Fuerte, directo y con los ojos cerrados.

P. Vamos que no quiere pertenecer al grupo de los porteros espectaculares, como el Mono Burgos y compañía.

R. Alguien dijo una vez que los porteros estamos un poco locos. No sé si será verdad. Lo importante, primero, es ser un buen portero, y luego las otras cosas. Como el Mono Burgos o como Gloobelard. Lo malo de esas actitudes es que si lo haces bien, todo lo demás se perdona o se agradece, pero si por lo que sea te sale mal el partido, la gente se va a quedar con que eres un payaso, con los detalles.

P. Raúl, Zidane, Ronaldo, Figo...Un peligro constante para un portero. Y luego resulta que igual marca el gol Helguera o Hierro.

R. Cuando íbamos a jugar contra el Deportivo, los periodistas sólo me preguntaban por mi amigo Makaay y yo les decía ¿qué pasa con Tristán, con Valerón, con Fran? Este domingo si Raúl o Ronaldo tienen un mal día, los cambian y sale Morientes o Guti o Portillo. ¿Y entonces qué? El Madrid es un equipazo. Raúl es el más imprevisible. Antes del partido ves muchos vídeos, estudias por dónde sale un jugador en el uno contra uno, por la izquierda o por la derecha, te aprendes sus manías, su estilo, más o menos las interiorizas, pero con Raúl nunca sabes. Unas veces por la derecha, otras por la izquierda, unas golpea con el interior, otras con el exterior. Nunca sabes. Algo parecido pasa con Kluivert o con Makaay.

P. ¿En los penaltis también influye el estudio de los vídeos?

R. No, hay mucho de suerte. Yo estudio a los lanzadores de penaltis, también a los que lanzan los córners, pero lo que tengo muy claro es que un penalti, a priori, significa un gol. Una distancia de 11 metros es casi insalvable para un portero y si lo paras es por suerte. Bueno, y por algunas cualidades del portero.

P. Usted clamó recientemente contra los árbitros porque, en su opinión, estaban perjudicando demasiado a la Real

R. Yo nunca había hablado de los árbitros, ni en Holanda ni en Inglaterra, porque si tienes un mal árbitro es para los dos equipos y si un día lo tienes a favor, otro está en contra. Al final, quedas siempre a la par. Lo que me ha extrañado es que esta temporada han estado generalmente en contra. No sé por qué han estado sólo en contra. Lo bueno es que ahora los periodistas y el público ven todos los partidos. Y resulta que López Nieto fue muy criticado por el partido contra el Deportivo, y a mi me gustó. Me parece un árbitro que si acierta o se equivoca lo hace para los dos equipos.

P. Pues ahora les visita el líder

R. Eso da igual. A mí lo que me preocupa es que en los últimos 12 partidos nos hayan pitado seis penaltis en contra cuando sólo uno -frente al Racing- lo era en realidad.

P. Árbitros aparte, se juegan ustedes la Liga ante el Madrid.

R. Normalmente, no suele ser posible que un equipo como la Real Sociedad pueda estar en el lugar que ahora ocupa. Pero en el fútbol no siempre gana el equipo que tiene los mejores jugadores. El Madrid es ese equipo, pero eso no significa que gane de antemano. Vamos a ver, vamos a jugar.