Sólo para bebés nórdicos

En los países nórdicos se consume poco calzado para los bebés que aún no andan. Los gustos también son diferentes a los de los países mediterráneos: menos concesiones estéticas y un concepto más práctico del producto. Hay, con todo, un hueco de mercado que la firma Cuquito está dispuesta a aprovechar. Esta empresa valenciana de calzado para bebé ha llegado a un acuerdo de colaboración con una firma de Dinamarca para la que fabricará en exclusiva calzado de bebé dirigido a los países del norte de Europa. Un calzado realizado con pieles con bajo contenido en cromo, tal y como se requiere en estos mercados, más blando y adaptado estéticamente a la mayor sobriedad de los países a los que se dirige.

La firma prevé que en tres años el 25% de su producción sea de este nuevo tipo de producto

Los primeros pares de este tipo de calzado salieron de la fábrica que la firma tiene en Meliana (L'Horta Nord) en dirección al norte de Europa hace tres meses y el gerente de Cuquito, Amadeo Folqués, explica su intención de combinar en las colecciones que lance los "gustos nórdicos" con "toda nuestra sensibilidad" en colores y acabados. En conjunto, la firma valenciana fabricará algo más de 20 modelos diferentes de este calzado, dirigido por completo a la exportación y de cuya comercialización se encarga su partenaire danés.

Esta nueva línea de trabajo mejorará notablemente las cifras de Cuquito en el extranjero. La empresa dirige en la actualidad la mitad de su producción a los mercados exteriores, principalmente a los europeos. Amadeo Folqués prevé que en el plazo de tres años y gracias a este acuerdo, la firma alcance a fabricar 200.000 pares anuales de esta nueva producción, que representarán aproximadamente el 25% de todo lo que sale de sus instalaciones. El acuerdo de colaboración con la firma danesa abarca los próximos 25 o 30 años, renovable cada cinco ejercicios y como segunda parte de este proyecto conjunto Cuquito está dispuesta a abordar los mercados del sur de Europa, adaptando el producto.

Cuquito conoce el mercado al que se dirige y adapta su producto en función de su evolución. Esta marca nació hace algo más de 40 años en la trastienda de una zapatería que el padre de Amadeo Folqués tenía en la calle Bolsería de Valencia. Las dependientas, explica el empresario valenciano, llamaban "cuquito" al calzado para bebés que aún no andan. El nombre cuajó y ha pervivido.

Folqués trabaja en un negocio, explica, que el presupuesto familiar cuida. "El gasto en bebé sigue siendo importante", asegura. Cambian, eso sí, las modas y sobre todo las tallas. "Los bebés nacen con los pies más grandes", comenta el gerente de Cuquito. Como hijo de zapatero recuerda que la talla más pequeña era la 14. "Ahora la menor es la 16".

La firma, por otro lado, tampoco descarta diversificar en el tipo de producción aunque asegura que aún no hay ninguna decisión concreta. En la actualidad Cuquito concentra la práctica totalidad de su producción en su centro de Meliana aunque subcontrata en Asia un 15% de la misma. La firma valenciana facturó el año pasado seis millones de euros, que suponen alrededor de un 12% más que en el ejercicio anterior.