Revisión de objetivos

Los máximos anuales de los mercados de valores han desaparecido a mucha mayor velocidad de la que se generaron debido a la repercusión que la escalada en el precio del petróleo ha tenido sobre la Bolsa estadounidense.

Los tres máximos anuales conseguidos en los tres días anteriores por la Bolsa española se esfumaron en esta última sesión, en la que el Ibex 35 cayó el 0,94%, con lo que en el conjunto de la semana este índice pierde el 0,05% y queda en 9.677,40 puntos. El índice general de la Bolsa de Madrid bajaba ayer el 0,78% para cerrar en 1.044,31 puntos.

La subida del precio del petróleo en Estados Unidos hasta tocar el nivel de los 60 dólares por barril terminó con la idílica opinión de muchos analistas de que el actual nivel de precios ya estaba descontado y que sólo cabía esperar un descenso de los precios al aumentar la demanda. La realidad ha impuesto otro criterio completamente diferente que consiste en trasladar directamente a las bolsas la inestabilidad del mercado del petróleo, en el que las nuevas subidas de precios se explicaban por la previsible carestía de productos refinados en la segunda parte del año, todo ello en Estados Unidos.

La razón por la cual las bolsas europeas han reflejado tan fielmente la inestabilidad del mercado de Estados Unidos está en la fragilidad de los argumentos que se exhibieron para justificar los máximos y en la propia acumulación de ganancias, que finalmente ha facilitado la cancelación de posiciones.

La contratación en el Mercado Continuo ascendió hasta 4.255,06 millones de euros, con más de 2.000 millones aportados por las operaciones institucionales. La caída de los precios se encontró, sin embargo, con bastante dinero de cara, lo que hizo subir la contratación en operaciones "abiertas" hasta 2.200,45 millones de euros.

El inesperado avance en abril de los pedidos de bienes duraderos en Estados Unidos, con un 5,5%, no tuvieron efecto alguno sobre unos inversores que ven en el precio del petróleo una amenaza creciente para sus intereses.