La meteórica carrera política del impulsor del proyecto
La expansión urbanística de la empresa Baqueira-Beret, SA fuera del Valle de Aran ha tenido en el socialista Joaquim Llena uno de sus principales aliados políticos. De hecho, la fulgurante carrera política de quien hoy es consejero de Agricultura de la Generalitat ha transcurrido en paralelo a la expansión de la mayor estación de esquí española. Entre 1995 y hasta mayo de 2006, Llena fue alcalde de Alt Àneu, el vasto municipio en el que Baqueira SA tiene puestos los ojos desde que el contiguo valle de Aran comenzó a estar saturado.
Llena alcanzó la alcaldía bajo las siglas de Unió Progresista del Pallars, en coalición con el PSC, partido al que se afilió en 1997. Tres años después, cuando la sociedad Baqueira comenzó la expansión hacia el Pallars, Llena ya era primer secretario de los socialistas leridanos. Meses más tarde, Llena lograba que su partido bendijera el proyecto. En 1999, Llena fue elegido diputado en el Parlamento catalán, una plataforma desde la que impulsó numerosas iniciativas para facilitar la ampliación de Baqueira, bajo el argumento de que el esquí llevaría el progreso al deprimido Pallars.
En 1998, Baqueira SA hacía públicos sus planes de expansión y se fijaba en el núcleo de Sorpe. Llena, como alcalde, no tardó en cambiar las normas urbanísticas del municipio para permitir la construcción de las pistas y la nueva urbanización.
"Verdes demagogos"
La operación se lastró por la intervención de la UE, que incluyó las montañas donde debían construirse las pistas en la Red Natura 2000. Esta protección fue siempre combatida por el alcalde y por buena parte de los vecinos. Los ecologistas y los vecinos que no opinaban lo mismo nunca fueron bienvenidos. Llena prohibió en marzo de 2000 que los contrarios al proyecto se reunieran en la sala de conferencias del ayuntamiento, para evitar "problemas de orden público".
Llena siempre ha tildado a las entidades ecologistas de "demagogos verdes urbanitas", y las ha acusado de "desconocer el territorio" y de querer presentar a los habitantes del valle como "unos bárbaros". Al ser nombrado secretario general de Agricultura y, después, consejero, Llena dejó la alcaldía en manos de Montserrat Morén. Ésta ha defendido los proyectos de Llena. Cree que permiten explotar el territorio "de forma controlada y respetuosa con el medio ambiente".
Llena declinó ayer hacer declaraciones, pero fuentes del Departamento de Agricultura dijeron que, cuando se puso el proyecto sobre la mesa, el actual consejero siempre se mostró partidario de que las nuevas construcciones no conllevaran la creación de nuevos núcleos urbanos, sino que estuvieran pegadas a los ya existentes.
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