El incierto papel de Suez y Frère en España

El tablero energético español no es ajeno a los intereses de Frère, ni a lo que suceda en torno a la discutida fusión entre Gaz de France y Suez, que ahora centra sus mayores esfuerzos. La incógnita sobre si la operación que crearía uno de los mayores gigantes europeos del sector -a la altura de la francesa EDF o de la alemana E.ON- sigue adelante o no, está por despejar. El reciente cambio de inquilino en el Palacio del Eliseo, además, no ayuda a ello. Más bien, al contrario.

El nuevo presidente francés, Nicolás Sarkozy, está sumido en un mar de dudas. Su Gobierno no ha dado luz verde hasta ahora a la fusión y hay que recordar que el Estado francés controla el 80% de Gaz de France. Albert Frère, vicepresidente de la empresa de electricidad y servicios francobelga, no tiene esas dudas. Es un firme partidario de la fusión. Encaja en su biografía empresarial, en sus hábitos de tomar participaciones grandes en empresas pequeñas y utilizarlas para hacerse con presas corporativas de mayor tamaño.

Intereses en la energía

El inversor belga fue el protagonista del penúltimo movimiento accionarial en Iberdrola. El 30 de mayo hizo público que tenía un 5% de la eléctrica (la primera española por valor bursátil y la segunda por número de clientes). Tras la fugaz ampliación de capital realizada por la compañía presidida por Sánchez Galán, el porcentaje que Frère controla se ha visto reducido al 4,6%. Las especulaciones sobre las intenciones del barón con estas acciones se desataron: para unos era el primer movimiento para lograr una fusión de Iberdrola y Suez; para otros es sólo una inversión financiera, ya que en caso contrario podría ser acusado de utilizar en su provecho de información privilegiada.

Suez, por su parte, también tiene intereses en España. Esta misma semana ha solicitado permiso a la Comisión Nacional de la Energía para aumentar su participación directa en Gas Natural por encima del 10%. En la actualidad tiene el 8,8% directamente. Suez y Frère, en este caso, comparten intereses con La Caixa -que también les acompaña en Agbar- y Repsol, socios mayoritarios de la gasista catalana.

Los intereses del aristócrata belga y la primera petrolera española, sin embargo, se separan en otro escenario energético. Frère, a través de sus sociedades inversoras, es uno de los principales accionistas de Total, a su vez accionista mayoritario de Cepsa, segunda petrolera española.