Consejos para no salir escaldado del verano
La ola de "calor africano" que se espera para este fin de semana puede amargar el principio de vacaciones de más de uno. Algunos de sus efectos se describen a continuación.
- Salud. Desde el 27 de julio, el Ministerio de Sanidad ha registrado seis muertes por los efectos del calor. El año pasado se contabilizaron 21 defunciones por las altas temperaturas, 12 más que en 2005. A estas muertes habría que sumar otras de enfermos cuyas afecciones se han agravado por el calor, pero en cuyos certificados de defunción no aparece la canícula como causa.
- Cuidados básicos. Para evitar los golpes de calor y las afecciones relacionadas con las altas temperaturas, conviene seguir algunos consejos del Ministerio de Sanidad: beber abundante agua; evitar los esfuerzos físicos en las horas de más calor; permanecer el mayor tiempo posible en lugares frescos; usar ropa clara, ligera y que deje transpirar; consultar al médico ante cualquier síntoma relacionado con las altas temperaturas y mantener las medicinas en un lugar fresco. Todos estos consejos son especialmente recomendables para los niños, los ancianos y los enfermos crónicos. Existe un teléfono de Cruz Roja de atención gratuita las 24 horas del día que ofrece además un servicio de consulta a los ciudadanos y proporciona visitas domiciliarias a las personas que estén en situación de riesgo. Es el 902 22 22 99.
- Zambullidas. Otro peligro asociado al verano es el de las zambullidas, causa del 5% de las lesiones medulares que se producen cada año en el país.
- Cáncer de piel. La exposición al sol en las horas centrales del día y sin protección es la primera causa de melanomas, un tipo de cáncer que va en aumento. Hay que vigilar sobre todo a los niños, y repetir la aplicación de cremas cada dos horas.
- Combinados refrescantes. A la hora de hidratarse, hay que tener cuidado con dos de las bebidas estrella del verano. El tinto de verano (vino con gaseosa o refresco de limón) o la clara (la misma mezcla pero con cerveza en vez de vino) pueden ser traicioneros. Su primer peligro, que se beba más de lo recomendable. "No dejan de ser bebidas alcohólicas, aunque tengan menos graduación", advirtió Alejandro Perales, presidente de la Asociación de Usuarios de la Comunicación. Por eso, si lo normal es tomarse una cerveza, no debe pasarse, por ejemplo, de dos claras. Además, el alcohol tiene un efecto deshidratante en el organismo que agrava las consecuencias de las altas temperaturas. Todo esto empeora por las campañas publicitarias que han arreciado este verano, según Perales.
- Medusas. Una de las causas de las plagas de medusas parece ser la temperatura elevada del agua. El año pasado estos invertebrados estuvieron más presentes que nunca en las costas mediterráneas, según asegura la Cruz Roja. Este verano, hasta el momento, se han detectado menos enjambres y picaduras. Pero si las temperaturas suben, es probable que vuelvan los molestos animales urticantes. La mayor presencia de estos organismos también se debe a la escasez de sus depredadores, como tortugas o atunes. Hasta el momento, las costas más afectadas han sido las de Girona, Barcelona, Baleares, Alicante y Granada, según el Ministerio de Medio Ambiente. Sin embargo, cualquier playa mediterránea (en la atlántica las medusas no son preocupantes) puede ser invadida. Si se presentan en abundancia lo recomendable es no bañarse para evitar las picaduras. Cuando entran en contacto con la piel conviene limpiar la zona afectada con agua salada, no frotarla, aplicar frío y acudir a un centro médico en caso de que los síntomas vayan más allá del simple picor y enrojecimiento de la zona afectada por la picadura.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.