Un problema de equipo, no personal

"No, aquí no ha cambiado nada". Fue una afirmación categórica. Y salió de la boca de Fernando Alonso cuando su conferencia de prensa estaba concluyendo. El español volvió a hablar claro y explicó lo que sucedió en las reuniones que mantuvo el jueves en el hotel de Estambul con el equipo McLaren Mercedes y su compañero Lewis Hamilton. Alonso comprendió que el asunto de Hungría y de la discusión entre el británico y Ron Dennis no habían cambiado nada. "Aquí todo sigue igual. Tanto en el equipo como en el trato conmigo", concluyó.

Sin embargo, Alonso desveló esta vez alguna de las claves de su malestar en la escudería. Entiende que no le están dando el trato que merece por haber convertido su coche en el mejor de la parrilla. Cuando el jueves se reunió con Dennis, el patrón del equipo, tanto él como Norbert Haugh, responsable de Mercedes en el mismo, así como Martin Withmarsh, el director, le explicaron la estrategia de las seis últimas carreras. "Todos nos hemos equivocado alguna vez y posiblemente volveremos a hacerlo", confesó Dennis; "pero aceptamos que somos humanos. Asumimos el compromiso de dar el mejor coche posible a los dos pilotos y de no discriminarles y esperamos de ellos que se involucren con el equipo y que no se repitan situaciones como la de Hungría. Todos vamos en la misma dirección".

Tal compromiso no es suficiente para Alonso, que cree que no se le ha compensado de ninguna manera el esfuerzo que realizó en el invierno para que el coche fuera competitivo, así como que nunca ha tenido prioridad sobre Hamilton y que, por contra, muchas veces se le ha perjudicado. "McLaren no estaba en ningún sitio el año pasado [no ganó ninguna carrera]. Yo sé cómo estaba el coche cuando me subí a él por primera vez en diciembre y cómo había mejorado en marzo cuando comenzó el campeonato", destacó el asturiano; "y esas seis o siete décimas que les he aportado no las veo reflejadas en ningún momento cuando estamos los dos en la pista. Éste es el rifirrafe del campeonato. ¿Pero quién no tiene problemas con sus jefes?".

Alonso insistió en que sus problemas no son con Hamilton, sino con el equipo. "Hablé con Lewis el lunes posterior al Gran Premio de Hungría porque él me llamó. Le felicité por la victoria porque no pude verle tras la carrera. Y ayer nos vimos en la comida y estuvimos reunidos. Me pidió disculpas por lo de Hungría y yo le dije que, si había hecho algo mal, me lo dijera. Me respondió que no. Por tanto, no tuve que disculparme de nada. No somos unos amigos increíbles, pero no hay problemas con él. Si los hay, él no es el hombre que los crea, sino el equipo". A diferencia de otras veces, sin embargo, Alonso afirmó que lo más probable es que siga en McLaren. "Yo sí lo sé", respondió cuando se le preguntó si sabía dónde correría en 2008; "tengo contrato con McLaren y aquí voy a competir si no pasa nada raro".

Lo demás perdió sentido. A nadie pareció importarle que Kimi Raikkonen (Ferrari) lograra el mejor tiempo en los primeros entrenamientos libres y Hamilton lo hiciera en los segundos.