La crisis fulmina 600 millones en obras

El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, recortará el gasto en 1.041 millones el año que le queda antes de las elecciones municipales. El ambicioso plan de ajuste anunciado ayer por el regidor pretende aplazar inversiones, rebajar salarios (Esperanza Aguirre también se sumó ayer al carro de las rebajas en las nóminas), renegociar contratos y eliminar subvenciones y la ayuda al desarrollo. Las cuentas municipales, las más endeudadas de España (6.752 millones), sufrirán el mayor mordisco de la democracia. El ahorro es equivalente a un 20% del presupuesto local. Gallardón ha entrado en la carrera de ajustes emprendidas por todas las administraciones. El regidor se reservó la noticia para acaparar la atención en el debate sobre el estado de la ciudad celebrado ayer. El plan de ajuste consiste en:

Habrá menos coches oficiales y los que queden serán de gama inferior Hay una brusca rebaja en las subvenciones y la ayuda al desarrollo

Hay una brusca rebaja en las subvenciones y la ayuda al desarrollo

- Aplazar inversiones. Se aplazan inversiones prometidas, entre ellas, el Centro Internacional de Convenciones. Un edificio en forma de sol entre las cuatro torres de Chamartín, que costaría 327 millones. El proyecto se paraliza cuando ya ha echado a andar. Las máquinas habían comenzado los movimientos de tierra. "Ahora se acondicionará el solar y se vallará. Se rellenarán los cimientos. y así cuando dentro de dos o tres años podamos reemprender el proyecto será más rápido", comenta el concejal de Hacienda, Juan Bravo, que ha estado con lápiz y goma durante semanas hasta ver de dónde podía recortar.

Otro de los proyectos que quedarán congelados es el estadio de Vallehermoso, en Chamberí, el único estadio con pista de atletismo homologada en Madrid, que costaría unos 99 millones. La goma de Bravo lo ha borrado de un plumazo.

Además, el Ayuntamiento ha frenado otras inversiones previstas para este año (90 millones) y algunas que había planeado hacer el próximo (otros 90). Varias escuelas infantiles, centros de día y de alzhéimer tendrán que esperar a tiempos mejores.

También quedarán en papel mojado la renovación de algunas carreteras de competencia municipal que ya estaban previstas.

- Gallardón gana más que Aguirre pese al ajuste. Otra de las medidas del plan de ajuste es un recorte del 15% en el sueldo del alcalde, los 57 concejales y los 125 altos cargos del Ayuntamiento. El ahorro va más allá de la bajada salarial aplicada por el Gobierno estatal puesto que los salarios del alcalde y los ediles de la ciudad están referidos al de los secretarios de Estado, que han visto menguada su nómina en un 10%. Al final, el alcalde de Madrid cobrará 101.987 euros y los concejales con responsabilidad de gobierno 95.868 euros. Tanto el regidor como sus ediles de confianza cobrarán más que Esperanza Aguirre (89.967 euros) y el presidente del Gobierno (78.185) tras la rebaja. Eso sí, el recorte del 15% de Gallardón afecta también a los directores generales, mientras que en la Comunidad de Madrid estos sufren una bajada del 10%.

Además, el Ayuntamiento prevé amortizar 755 plazas de funcionarios. "Con la misma plantilla tendremos que dar el mismo servicio y poner en funcionamiento los nuevos equipamientos", apuntó Bravo. CC OO ya ha criticado el "brutal recorte de Gallardón realizado con ausencia de diálogo social".

- Basura y limpieza baratas; no se tocan servicios sociales. El Ayuntamiento quiere renovar las condiciones de los contratos de los principales servicios municipales como el de recogida de basura, limpieza viaria o mantenimiento de parques y jardines para reducir el gasto un 15%. "El límite legal para modificados es del 20%. En algunos contratos se llegará a eso y en otros nos quedaremos en el 10%", explica Juan Bravo, el concejal de Hacienda, quien reconoce que esta modificación "conlleva una reducción de los servicios y cada concejalía tendrá que decidir cómo hacerlo". El Ayuntamiento dice que no se tocarán los servicios relacionados con teleasistencia, ayuda en domicilio y centros de día, que prestan empresas privadas pagadas por el Ayuntamiento. También habrá un tajo del 25% en los gastos para actos protocolarios (97.325 euros) y otras rebajas de gestión. En total, el Ayuntamiento espera ahorrar 211 millones con estas partidas.

- Alquileres más económicos. Gallardón anunció que se renegociarán los contratos de alquiler de los edificios del Ayuntamiento para lograr un ahorro del 10%. Los contactos para hacerlo ya han comenzado. Ya se han rebajado los contratos de la sede de la Concejalía de Hacienda en Alcalá, 45, el inmueble de Madrid Salud. El Ayuntamiento pagará menos por la renta de otros edificios, como uno de Medio Ambiente en la calle de Bustamante, o la sede de la Policía Municipal, en Julián Camarillo.

- Coches oficiales: de 167 a 57. El Ayuntamiento de Madrid tiene 167 coches oficiales para el alcalde, concejales y personal directivo. Además, tiene otra flota de coches de gama baja para que funcionarios técnicos puedan desplazarse para hacer sus servicios. Por ejemplo, para que un técnico de obra compruebe el estado de las mismas, o un inspector de comercios se desplace a las tiendas. El alcalde anunció ayer que se reducirán los coches oficiales para los altos cargos. Solo podrán contar con ellos aquellos que por motivos de seguridad necesiten escolta. Esto reduce la flota municipal a 57. Además, se renegociarán los contratos para cambiar los automóviles por otros de menor gama. "Serán híbridos o eléctricos", afirmó el regidor durante el pleno. Fuentes municipales avanzaron que el regidor está en proceso de cambiar uno de sus dos Audi 100 blindados, con un coste de 600.000 euros, por un híbrido (tipo Toyota Prius), de unos 40.000 euros.

- Adiós a la tele local. El Ayuntamiento de Madrid contaba con una televisión local: Esmadrid. Los planes de Gallardón pasan por cerrarla, lo que supone un ahorro de cinco millones. La ley impide venderla o ceder la gestión. Hay otras medidas como adelantar el cierre de algunas instalaciones municipales a las 17.00 para lograr ahorro energético, la reducción de las ayudas al desarrollo (18 millones ) o las subvenciones municipales.