El Estado cierra abril con un déficit del 0,6% del PIB por la pérdida importante de ingresos

Las arcas de la Seguridad Social siguen resistiendo al envite de la crisis al mantener un superávit de 10.172 millones hasta abril, aunque no de forma gratuita. De hecho, la reducción de los ingresos por cotizaciones, apartado que registró en los tres primeros meses del año su primer descenso en la última década, mantiene una caída del 2,4% por el constante aumento del desempleo. Fruto de esta "pérdida de ingresos importante", tal y como ha admitido el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, la Administración central ha cerrado los cuatro primeros meses de 2009 con un déficit de 6.553 millones de euros, lo que equivale al 0,60% del Producto Interior Bruto (PIB).

Ocaña ha señalado que la evolución negativa de los ingresos va en línea con la situación económica, aunque ha insistido en que también se combinan las medidas tomadas anticrisis, que tienen un impacto significativo sobre la recaudación. En cualquier caso ha advertido de que no se atisban "brotes verdes" de recuperación en la recaudación de impuestos, que se estabilizará "más tarde" que el resto de la economía, porque funciona con un cierto retraso. Así, ha advertido de que la mejora en los ingresos del Estado, cuando se produzca, se hará de forma desigual en los distintos tributos y por ahora, ha insistido, "no hay recuperación ninguna, como es normal".

Según ha informado hoy el Ministerio de Trabajo, las cotizaciones sociales han caído un 2,41% en abril, idéntico porcentaje que en marzo, con una recaudación de 34.604 millones. Así, la reducción de las entradas por los pagos que efectúan mensualmente los trabajadores y su conjunción con el crecimiento de los mayores pagos, que han aumentado un 8,23% en el mismo periodo hasta los 31.150 millones; han llevado a la tesorería del sistema a reducir su excedente de caja un 20,87% entre enero y abril.

Además, el superávit con el que la Seguridad Social ha cerrado abril, de 10.172 millones de euros pero a los que hay que restar 1.143 millones de gastos previstos pero que todavía no han sido imputados en los presupuestos, se verá sensiblemente reducido en breve con la primera paga extraordinaria del ejercicio. En cualquier caso, el Gobierno confía en cerrar el año con unos excedentes de 5.586 millones, según anunció hace un mes el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

Un tercio del total previsto para 2009

A favor de la previsión del Ejecutivo, según añade el departamento que dirige Celestino Corbacho, está el dato de que a cierre de abril la Seguridad Social ya había ingresado un tercio del total de los 112.436,6 millones de euros previstos para todo 2009 por las cotizaciones sociales, apartado que representa el 87% de los ingresos, una vez superada la fase más destructiva de la crisis, que los analistas y el propio Gobierno centran en el periodo comprendido entre el pasado noviembre y el primer trimestre de 2009. No obstante, la destrucción de empleo seguirá pasando factura a la caja del sistema durante los próximos meses.

En cuanto a la evolución de los ingresos del Estado, el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) sigue "comportándose", según el secretario de Estado, mejor que el resto de los tributos, a pesar de que registró hasta abril una caída del 11,7%. Aunque este apartado sigue condicionado a la baja por la ayuda de los 400 euros, una medida que, solo en abril, ha significado dejar de ingresar 2.000 millones de euros. De hecho, sin el aumento del pago fraccionado y el mayor número de devoluciones ya registrado la bajada de la recaudación en IRPF habría sido del 3,6%.

Además, en los datos de este mes se produce una distorsión con el tributo que grava a las empresas, el Impuesto sobre Sociedades, cuya recaudación ha aumentado un 59% debido a que el año pasado se amplió el plazo para el pago fraccionado y los ingresos importantes no se registraron hasta mayo, de ahí esta diferencia interanual que se corregirá en próximos meses. Asimismo, ha recordado, durante el presente ejercicio ha desaparecido la libertad de opción del pago del 18% en la última cuota líquida del impuesto. Sin ambos efectos, los ingresos por este tributo habrían disminuido un 27,7%, más en línea con la situación de crisis.

Por su parte, la recaudación del IVA mantiene una importante caída, del 33%, pero dicha bajada habría sido menor, del 21,1%, si no se estuviesen aplicando los adelantos de la devolución de este tributo o el aplazamiento de sus pagos. En total, el conjunto de actuaciones sobre este impuesto han supuesto dejar de ingresar 5.850 millones. De otro lado, la recaudación por los Impuestos Especiales se redujo un 3,8% debido a la "atonía del consumo", según ha reconocido Ocaña.

Desde la oposición, el líder del PP, Mariano Rajoy, ha asegurado que el Gobierno "retrasará la recuperación" económica y ocasionará cada vez "más problemas". Además, le ha acusado, ya que habla de síntomas de mejora de la situación, de ser "un secante de brotes verdes o de cualquier otro color" y adoptar "decisiones equivocadas", lo que en su opinión redunda en la falta de confianza. Para Rajoy, España saldrá de la crisis, pero para ello es necesario, ha afirmado, "cambiar de raíz la actual política económica".