ING obtuvo un beneficio neto de 186 millones de euros (258 millones de euros brutos) en España y Portugal en 2019, un 14% más que los 163 millones del año anterior, según informó el consejero delegado de la entidad en Iberia, Roel Huisman, que llegó al cargo en octubre pasado tras la marcha de César González-Bueno.

Este año, la entidad ofreció en rueda de prensa menos datos financieros que en ocasiones anteriores, debido a la nueva estructura que ha diseñado el grupo ING, en la que España es una sucursal. La entidad se centrará en el crecimiento de los clientes a través de los préstamos hipotecarios y los de consumo mientras seguirá fomentando los fondos de inversión para los clientes dispuestos mantenerse una media de siete años. Entre ambos tipos de crédito, ING suma 26.000 millones, un 9% más que en 2018, y cuenta con cuatro millones de clientes, un 3% más. La morosidad total es el 0,94%, muy por debajo del sector, y la entidad aseguró que vigilará que esta cifra no suba aunque se desacelere la economía.

Los préstamos hipotecarios han crecido más de un 12% y la concesión ha sido de unos 3.500 millones, con lo que el banco financia uno de cada doce euros en España de estos préstamos, según calcula la entidad. Respecto a la financiación, el banco ha concedido 230.000 préstamos al consumo, con una producción bruta de 2.300 millones de euros.

Los clientes que disponen de cuenta nómina son 2,3 millones y la cifra ha crecido un 7%. “Nuestros clientes están con nosotros porque quieren, no como fruto de una fusión o adquisición”, ha apostillado la directora de banca para particulares, Almudena Román.

Además, debido al entorno de bajos tipos de interés y a que la entidad ya no puede ofrecer prácticamente ninguna remuneración en depósitos, decidieron buscar nuevas alternativas para sus clientes. En este sentido, el banco lanzó recientemente un servicio de inversión, en el que ya ha acumulado unos 800 millones.

Román ha reconocido que, como en cualquier otra situación de alta volatilidad que ha habido en el pasado, como el Brexit, los fondos de inversión sufren la salida de algunos clientes. “Nada que no responda a la dinámica normal del mercado en estos días”, ha dicho. No obstante, la responsable de banca minorista de la entidad ha asegurado que están llamando a sus clientes a mantener la calma y la tranquilidad y a pensar a largo plazo.

“Mucha atención” al coronavirus

En esta línea, el consejero delegado de ING España y Portugal, quien asumió este puesto el pasado mes de noviembre, ha reconocido estar prestando “mucha atención” a las nuevas informaciones relacionadas con el coronavirus. Según ha dicho, el consenso ya reconoce el impacto real en la economía y eso “preocupa a todos”. También ha destacado que fue una sorpresa la decisión que tomó ayer la Reserva Federal (Fed) de bajar los tipos de interés.

Por otro lado, Román no ha querido adelantar el resultado de las conversaciones con Bizum, que “continúan” y que anunciarán cuando “esté todo listo”. La directiva ha indicado que Bizum les gusta, pero que no quieren contar nada al respecto de los avances, y solo anunciarlo cuando los clientes puedan usarlo. A su vez, ha recordado que los clientes pueden usar Twyp y una gran red de cajeros, servicio que “no tiene ninguna incompatibilidad con Bizum”.

El consejero delegado , ha agradecido el resultado al equipo “fuerte y comprometido” de la entidad, trasladando así su confianza y su intención de “no realizar cambios radicales”. A principios del próximo verano todos los empleados se mudarán a una nueva sede en Campo de las Naciones, donde se unificarán todas las actividades.