El FROB admite que la recuperación de las ayudas públicas en la banca “será limitada y escasa”
El presidente del fondo de rescate, Jaime Ponce, cree adecuado salir del capital de CaixaBank con pequeñas ventas de acciones
El presidente de la Autoridad de Resolución Ejecutiva (FROB), Jaime Ponce, ha admitido que la recuperación de los 58.000 millones que se inyectaron en los bancos, procedentes de las antiguas cajas de ahorros, en la pasada crisis financiera, “será escasa y limitada” Ponce ha explicado que la valoración actual del 62% de Bankia, a precio de mercado, y los activos de su matriz, BFA, son 3.600 millones. No obstante, matizó que no es una cifra definitiva “porque no vamos a vender las acciones a corto plazo, pero hay que admitir que la situación es la que es dada la valoración del sector bancario”.
Jaime Ponce, que compareció en la Comisión de Economía del Congreso de los Diputados, comentó que, una vez cerrado el canje de acciones de Bankia por CaixaBank, el Estado tendrá el 16% de la nueva entidad frente al 62% que ahora tiene en el banco público. Ponce dijo que sería más fácil vender este porcentaje más pequeño de acciones en operaciones diarias como ha hecho el Gobierno británico para reducir su participación en Lloyds Bank.
El presidente del FROB aseguró que el hecho de que el Estado vaya a tener una consejera en CaixaBank, Teresa Santero, no frenará la vocación de venta de las acciones si hubiera un momento adecuado.
Ponce explicó el fondo encargó al banco de inversión Nomura que determinara si el precio pagado por Bankia era el más adecuado para rentabilizar la inversión del Estado. La respuesta fue positiva por la posible revalorización futura y que comparaba mejor que otras fusiones con diferentes bancos, en línea con lo manifestado por José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia. No obstante, el directivo admitió que se debe ser cauto con las previsiones “porque el mercado es soberano y muy difícil de predecir”.
La fusión mejora la recuperación de ayudas
“Desde que se anunció la fusión, Bankia ha subido un 10% frente a las caídas de la cotización de otros bancos, lo que demuestra que es una operación conveniente” indicó. “Parece indudable que la participación pública a desinvertir gana valor. Todos los estudios independientes lo confirman. Tiene sentido industrial, económico y estratégico. Desde la perspectiva pública, es un paso adecuado orientado siempre a la maximización del futuro retorno de ayudas públicas”, concluyó Ponce.
Los diputados preguntaron por la posible reducción de plantilla en la fusión. Ponce dijo que no podía responder porque no se habían anunciado los planes por parte de los gestores. No obstante, admitió que es una operación enfocada a la recuperación de valor gracias a las sinergias que pasan por cierre de oficinas y despidos.
También fue interrogado por el futuro de Sareb, el banco malo. Explicó que hay que ser prudentes sobre las expectativas, aunque la situación actual sea muy complicada, con recursos propios negativos, porque la sociedad ha optado por ventas pequeñas, que llevan más tiempo pero son más rentables que la liquidación de grandes carteras a inversores mayoristas.
Respecto a la posible utilización de las viviendas de Sareb para ayudar a familias vulnerables, Ponce cifró en 10.000 las personas que se están beneficiando al utilizar pisos sociales. Comentó que Sareb ha llegado a acuerdos con Comunidades Autónomas para fomentar esta labor, aunque también recordó que tiene el dilema de atender esta preocupación social o buscar la rentabilidad de la cartera. Indicó que casi nunca ha participado en desahucios de familias: “Tiene una preocupación reputacional por la participación del FROB”, afirmó. Y añadió que si lo ha hecho, ha seguido las mejores prácticas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.