Las aerolíneas presionan al Gobierno para que tumbe la subida de tasas de Aena

Las aerolíneas se han levantado en armas contra la intención de Aena de aumentar las tasas aeroportuarias un 5,5% en los próximos cinco años. Y no solo se trata de una queja formal. Representantes de las distintas asociaciones de compañías aéreas, tanto nacionales como internacionales, están manteniendo encuentros a nivel político con el Gobierno y la oposición para intentar frenar esa propuesta, y que el Consejo de Ministros de marcha atrás o, al menos, modere esa subida que se produce justo cuando la aviación comercial atraviesa la mayor crisis de la historia debido a las consecuencias de la pandemia del coronavirus, según informan fuentes del sector.

Las compañías confían en que la propuesta del Documento de Regulación Aeroportuaria (DORA II) 2022-2026 que ha hecho el gestor aeroportuario tenga una dura réplica de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Mientras llega a la comisión, es necesario el trámite de la Dirección General de Aviación Civil del Ministerio de Transportes (DGAC), que suele dar luz verde a los documentos que elabora Aena sin apenas retoques (no en vano, el Estado es propietario del 51% del gestor a través de Enaire, dependiente del mismo departamento). Y confían, en último término, que el Gobierno sea receptivo a sus demandas y modifique a la baja la subida cuando el documento llegue al Consejo de Ministros, previsiblemente en septiembre.

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Los contactos no se limitan a miembros del Ejecutivo. El lobby aéreo también ha mantenido reuniones con representantes de la oposición. De hecho, el Partido Popular defenderá este martes en la Comisión de Industria, Comercio y Turismo del Congreso una proposición no de ley (PNL) relativa al reposicionamiento competitivo del Destino España en la que se incluyen gran parte de las demandas del sector.

Entre ellas, se encuentran la congelación de las tasas aeroportuarias que incluyan un sistema de bonificaciones o descuentos del 25% en adelante en función de los viajeros transportados o la apertura de rutas, y la subvención por parte del Estado de los costes de las medidas de prevención la covid-19, control y seguridad sanitaria que Aena también quiere cargar a las compañías aéreas.

Rebaja del 4%

Para calentar el ambiente, la Asociación Internacional del Transporte (IATA, por sus siglas en inglés), que agrupa a 290 aerolíneas de todo el mundo, lanzaba una dura advertencia este viernes, en una declaración inusual —ya que se refería expresamente a un país cuando sus comunicados suelen versar sobre todo el sector— en la que calificaba la subida de Aena de “irresponsable”. En lugar de la subida de tasas propuesta por el gestor aeroportuario, la IATA reclama una rebaja del 4%, y que se desestime también la intención de Aena de recuperar los ingresos perdidos en 2020 y este arranque de 2021 por el efecto de la pandemia mediante un cargo adicional “por servicios que nunca fueron ofrecidos o a los que las aerolíneas no pudieron acceder”.

“La industria de la aviación está en crisis. Todo el mundo necesita reducir costes y mejorar la eficiencia para reparar el daño que ha supuesto la crisis de la covid-19. Tras analizar la situación de Aena, las aerolíneas creen que el operador aeroportuario podría reducir sus tarifas en un 4%. Así que proponer pasar la carga de la recuperación económica a los clientes con un aumento del 5,5%, es nada menos que irresponsable. La DGAC debería rechazar inmediatamente la solicitud e instruir a Aena para que trabaje con las aerolíneas en un plan de recuperación mutuamente acordado”, dijo Willie Walsh, director general de IATA.

Para la asociación, Aena puede financiar fácilmente pérdidas a corto plazo sin incrementar los costes para sus clientes con una excelente calificación crediticia para acceder a financiación, y recordó los dividendos repartidos en los últimos años. “Sus accionistas fueron bien recompensados y ahora deben compartir parte del impacto de la crisis. Y, como el resto de la industria, debe buscar la eficiencia operativa en la reducción de costes, que, por otra parte, no son los más baratos de Europa”, apuntó Walsh.

Fuerte caída de la demanda

La asociación afirma que el aumento de tasas pone en peligro la recuperación del turismo y del sector. La demanda de pasajeros se desplomó un 76% en 2020 y no se espera que se recupere por completo hasta 2024. El número de destinos con enlaces directos a España se redujo de 1.800 (en 2019) a 234 (en 2020). IATA también recuerda que se han perdido o puesto en riesgo más de 1,1 millones de puestos de trabajo en España y que se han evaporado más de 60 000 millones de euros del PIB. La contribución de los viajes y el turismo a la economía española se vio reducida del 12% al 4%.

Apenas unas horas después, Luis Gallego, sucesor de Walsh al frente del grupo IAG —del que forma parte Iberia—, calificaba de “sinsentido” la pretendida subida tarifaria en los aeropuertos para el próximo quinquenio, porque el sector “lleva más de un año sin ingresos y este es un momento para reconstruir entre todos”. Desde su punto de vista, cualquier retoque al alza en los precios que pagan las aerolíneas es “un error grave” que lastrará la recuperación de la movilidad. “Si España quiere ser competitiva es un error subir tasas a un sector clave”.

El gestor aeroportuario Aena defiende que su propuesta concentra la subida al final del quinquenio cuando ya se haya recuperado previsiblemente el tráfico aéreo, y aseguran “la recuperación del tráfico y del turismo” desde una contención de los costes y de la inversión, tras registrar fuertes pérdidas. Además, la empresa que preside Maurici Lucena insiste en que las tasas se encuentran entre las más bajas de Europa.