Bruselas obligará a la banca a ofrecer servicios de pagos y transferencias instantáneos

Los bancos van a tener que ofrecer servicios de pago y transferencias instantáneos a sus clientes y a un precio que no podrá ser superior al del mismo servicio en plazos más largos. Estas son las dos principales novedades del reglamento que prepara la Comisión Europea para extender estas transacciones en la Unión, según el la propuesta de reglamento aprobada este miércoles por el Ejecutivo bruselense, que entiende que desarrollar esta forma de pago es “necesario para actualizar y modernizar el área única de pagos del euro”. Esta supone ahora el 11% de todas las transferencias que se hacen, una cifra que los técnicos de la Comisión consideran muy baja.

La revolución tecnológica está llevando a las diferentes instituciones europeas a promover el desarrollo de las finanzas en este campo. Por ejemplo, el Banco Central Europeo lleva meses con los trabajos para implantar el euro digital; y en las reuniones del Eurogrupo —el órgano que agrupa a los ministros de finanzas de la eurozona— raro es el día que no se aborda este último tema.

Ahora, la Comisión busca impulsar las transferencias y los pagos instantáneos por medios digitales se hagan como se hagan: a través de banca electrónica o utilizando aplicaciones en los móviles, como Bizum, la aplicación desarrollada por la banca española. Además, la posibilidad deberá estar abierta las 24 horas del día y los siete días de la semana, sean festivos o no. El mecanismo legal al que recurre la Comisión para realizar su propuesta es un reglamento, es decir, una vez el texto inicial del Ejecutivo comunitario pasa por el filtro del Consejo de la UE y el del Parlamento Europeo y recibe el visto bueno de ambos, entra en vigor sin necesidad de trasponerse a la legislación de cada Estado miembro.

Para defender su postura de obligar a bancos y otro tipo de empresas del sector, el Ejecutivo de Bruselas explica que el desarrollo de esta oferta no es homogéneo en toda la UE. Según los datos que expone, en la mayor parte de países el sector financiero sí que ha desarrollado las opciones de pagos instantáneos. Sin embargo, habría “un tercio” de los Estados miembros que no contarían con este despliegue. Fuentes del sector explican que en España esta parte de la propuesta de reglamento comunitario no tendría un gran impacto porque ya hay un gran desarrollo de este tipo de aplicaciones y mecanismos de pago.

Más impacto puede tener en España las obligaciones sobre el cobro de comisiones, ya que obliga a fijar el mismo precio para las transferencias instantáneas que para las demás. “No vemos justificación para que unas transacciones tengan un precio mayor que otros”, justifican fuentes de la Comisión. Solo en el caso de las transacciones en el que se cambie de divisa se podrá cobrar algo más. Esto, en principio, no afectaría a la aplicación Bizum, puesto que en ella los pagos y transferencias son gratuitos, pero sí que podría cambiar bastante lo que sucede en la banca electrónica. En la actualidad en muchas entidades españolas, cuando un cliente realiza una transferencia sí que tiene que pagar una comisión si quiere que el dinero llegue inmediatamente a su destino y no tiene que hacerlo si espera un día. Es en este último punto en el que tendrá su impacto en España, puesto que al fijar la obligación de que todos los precios sean iguales los bancos, según la redacción actual, tendrán la opción de cobrar comisiones por todas las transferencias (también las de Bizum) o no hacerlo.

El Ejecutivo comunitario no cree que esta última medida vaya a traducirse en un incremento de todas las transferencias ―instantáneas o no― para compensar por la pérdida de comisiones en los pagos inmediatos. Fuentes comunitarias defienden que la banca no reaccionará así por una cuestión de imagen.