Claudio Domenicali, el ingeniero que ha transformado Ducati: “Somos la elección de quienes buscan algo especial”

Cuando el joven Claudio Domenicali llegó a Ducati, aquel ingeniero mecánico recién salido de la Universidad de Bolonia no buscaba iniciar una larga carrera que le llevara a la cúspide de la firma. El fabricante de motocicletas con sede en Bolonia (Italia) era un actor pequeño dentro del sector, y Domenicali, su cuarto ingeniero en nómina, apasionado de la ciencia, la mecánica y las motos, se dijo “vayamos allí un par de años”. 32 años después ahí sigue. Y efectivamente, este padre de tres hijos admirador de Elon Musk y Steve Jobs, amante del esquí, la bicicleta de montaña y los pastores alemanes, ascendió en el organigrama hasta ser hoy, a sus 58 años, el jefe de todo.

Poco después de aterrizar procedente de Alemania, donde se vio con la gente de Audi, dueños de la marca desde 2012, el consejero delegado atiende a Negocios en el cuartel general de la empresa, en pleno valle del motor italiano. Muy cerca, grupos de escolares pasean por el museo donde resplandecen las réplicas de dos ruedas con las que algunos de sus pilotos se han coronado campeones del mundo —los últimos, Pecco Bagnaia en MotoGP y Álvaro Bautista en Superbikes—. Y cientos de empleados ensamblan los motores y aprietan el acelerador hasta rozar los 200 kilómetros hora en el banco de pruebas de la fábrica. “La seguridad de mucha gente depende de la calidad de tu trabajo”, se lee en un cartel. Hoy son 350 ingenieros y más de 2.000 empleados en todo el planeta.

Pregunta. Vienen de un 2022 de ingresos récord, pero este 2023 la fuerte caída de ventas en China está ensombreciendo sus resultados.

Respuesta. China se encuentra en una situación económica compleja por primera vez en 20 años. Ya no es tan seguro para sus habitantes que el próximo año vaya a ser mejor que el anterior, y estaban acostumbrados a un aumento del PIB del 8% cada año. Ahora hay mucha más incertidumbre, y nuestro segmento no es el transporte, es el entretenimiento, por lo que es uno de los que más está sufriendo. Además, ha habido una competencia de precios feroz, porque muchas marcas tienen demasiado stock y empujan su producto hacia el mercado. No hemos querido entrar en esa guerra, así que sufrimos más que otros en volumen, pero tenemos una filosofía muy clara: no estamos luchando por el volumen.

P. ¿A qué se refiere cuando dicen que son una empresa de entretenimiento?

R. Si lo que quieres es solo moverte del punto A al punto B, hay opciones mejores y más baratas que una Ducati. Somos la elección de quienes buscan algo especial construido con materiales de altísima calidad, con un diseño muy cuidado, por lo que no nos vemos simplemente compitiendo con otras marcas de motocicletas, sino por ejemplo, con unas vacaciones. Puedes decidir que tienes un presupuesto de 10.000 euros para gastar, y puedes elegir entre una moto o irte de viaje. Ducati no es sólo la motocicleta. Te compras un mundo de cosas en el que las carreras son las más obvias. Te conviertes en ducatista.

P. Se busca crear comunidad.

R. Tenemos un millón de clientes en nuestra base de datos, y los conocemos por su nombre. Así nos relacionamos con ellos. De ese millón tenemos 12.000 VIPs, los más apasionados. Ayer 10 de ellos me escribieron un correo de agradecimiento por esto [señala el calendario personalizado de Ducati que han recibido por ser los que más compran]. Los muy altos en el ranking reciben una invitación para MotoGP, por lo que generalmente reservamos 20 plazas en cada carrera para ellos. El primer fin de semana de mayo tenemos un evento que se llama Let’s Ride Together y en todo el mundo cada club y concesionario organiza un encuentro, así que creas una imagen fantástica porque tienes desfiles en San Francisco, Sídney, Roma, Madrid, Barcelona...

P. ¿Qué ha cambiado en sus 10 años como consejero delegado?

R. La empresa es mucho más global y la percepción de la marca entre los clientes es mucho más sólida. En el pasado nos veían más bien como una buena opción potencial, pero tal vez un poco preocupante. Un tipo de empresa extraña de Italia, que hace muy buenas motocicletas, pero en la que no estoy seguro de poder confiar al 100%. Eso era lo típico. Hemos trabajado como maníacos de la calidad y ahora estamos muy orgullosos de lo que somos. En 2022 alcanzamos los 1.000 millones en ventas, un punto de inflexión. Cuando me uní a la compañía vendíamos algo así como 2.000 motocicletas, y el año pasado vendimos más de 60.000. A nivel global somos una empresa de tamaño mediano, pero para esta región [Emilia Romagna] es muy relevante.

P. ¿Es optimista de cara a 2024?

R. Cuando quieren comprar una Ducati, hay un cierto porcentaje de clientes que pide un préstamo, por lo que la cuota mensual, por supuesto, ha ido aumentando estos últimos años. A mediados de 2024, o incluso antes, se espera que bajen los tipos de interés debido a que la inflación ya está más bajo control, y por tanto también se reducirán las cuotas para comprar tu Multistrada [el modelo más popular]. Nuestras perspectivas para el próximo año son similares a las de este. China sigue siendo un mercado muy complicado, pero hemos aprendido que allí todo cambia muy rápido, y puede ser que nos sorprenda una recuperación más rápida de lo previsto, aunque no es nuestro escenario central.

P. ¿Y qué hay de España?

R. Estamos entusiasmados con el cambio que se producirá en enero al asumir Audi España la distribución de Ducati. Creemos que podemos dar un salto al aprovechar las sinergias, porque la percepción de marca de Audi es muy alta.

P. ¿Qué le inspira?

R. He leído la biografía de Steve Jobs, la de Isaacson, creo que unas cinco veces. Hice un guion a partir de ella. Tenía un ímpetu tremendo. Esa mezcla entre diseño y tecnología que es muy cercana a Ducati. Buscaba continuamente tecnologías que cambiaran la vida de la gente. Y el otro es Elon Musk. Ahora todo el mundo habla de Tesla porque ha explotado y su capitalización es tan grande que supera la de todas las demás empresas automotrices juntas. Pero lo fantástico de Elon es que es físico. Cuando empezó a fabricar coches eléctricos, las baterías eran muy caras, por lo que necesitaban abaratar los vehículos, así que fue a ver a su ingeniero y propuso construir una máquina lo suficientemente grande como para fabricar un único componente, en lugar de cuatro. Lo que necesitas para eso es tener visión, estar loco y decir, hablemos de física.

P. Hablando de vehículos eléctricos, ¿por qué se ha avanzado menos en las motos?

R. En la industria automovilística existen unas reglas muy claras para reducir año tras año las emisiones de la flota, pero en las motocicletas esto no ha sucedido. La Asociación de Fabricantes Europeos de Motocicletas defiende la electrificación del segmento bajo, el que circula en la ciudad, y de los ciclomotores y motos pequeñas. El problema de volverte totalmente eléctrico con motos deportivas de alta potencia es que la autonomía es demasiado limitada si quieres que tenga un peso aceptable, pero la batería está mejorando cada vez más, por lo que ahora estamos haciendo prototipos para preparar la salida al mercado de una moto eléctrica. En realidad, las reglas no nos obligan a ello, por eso queremos que el cliente decida comprarla porque le guste, no porque esté obligado a hacerlo.

P. Una de deportes. ¿Cómo ve la llegada de Marc Márquez al equipo? ¿La convivencia con pilotos de tanto nivel será complicada?

R. Complicada, complicada. Creo que será complicada pero positiva. Por supuesto que habrá rivalidad, porque en realidad Pecco [Bagnaia] quiere volver a ser campeón del mundo, Jorge [Martín] quiere tener una segunda oportunidad y se lo merecía por completo, y Enea Bastianini ganó cuatro carreras el año pasado y este año se lesionó. Luego está Bezzecchi que dice, en realidad fui tercero en el campeonato... pero el año que viene lo haré mejor. Y Marc, que no necesita presentación, seis veces campeón del mundo. Por lo que habrá competencia entre los pilotos de Ducati. Los últimos años no ha estado rindiendo del todo, primero por cuestiones físicas, y luego tal vez porque ya no tenía las mismas sensaciones que antes sobre su moto, por lo que habrá más competencia, pero, por otro lado, tenemos una filosofía en la que compartimos los datos entre los pilotos, por lo que todos aprenden unos de otros.

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